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Una de las inquietudes más frecuentes entre las madres que quieren amamantar a sus bebés es: “¿Tendré leche suficiente para alimentar a mi bebé?”. Y con esta duda empiezan los problemas. Por eso, a menudo, se buscan “remedios” para asegurar o aumentar la producción, porque se cree que el recién nacido se queda con hambre. ¿Quieres saber qué alimentos ayudan a la producción de leche materna? Te lo contamos.
Cómo producir leche materna en abundancia
Si esperabas encontrar una larga lista de alimentos que ayudan a la producción de leche materna, siento decirte que todo lo que has podido leer o escuchar no son más que mitos. A lo largo de la historia se han transmitido de generación en generación diferentes trucos para tener más leche con la que amamantar al bebé, pero lo cierto es que no hay evidencia científica alguna de que esta propiedad sea cierta.
La única manera de aumentar la producción de leche materna de forma natural es a través de una succión correcta y frecuente. Es decir:
- Sin limitar las tomas (llegando a ofrecer si el bebé no pide a demanda con la suficiente asiduidad).
- A través de un agarre correcto, comprobando que la succión y el drenaje del pecho son adecuados.
- Si es posible, sin interferencias como biberones o tetinas.
- La clave para ayudar a la producción de leche materna está en la frecuencia: cuanto más a menudo mama un bebé mayor será la producción.
De hecho, junto a la variación de hormonas en el cuerpo de la mujer gracias a la salida de la placenta tras el parto, la estimulación del pecho es lo que consigue que suba la leche de transición tras el calostro, para llegar después la leche madura.
Alimentos que ayudan a la producción de leche
Son muchos los alimentos que podríamos incluir en este listado, ya que incluso varían según en el país en el que nos encontramos. Esto es un poco como los “remedios de la abuela”, cada familia tiene su truco y asegura que le funciona. Y aunque es cierto que la mayoría no suponen contraindicación alguna (ojo porque varios sí), nunca se debe abusar de ellos.
Y lo más importante: no podemos perpetuar la creencia de que con tal alimento se logró tener más leche. Muchas veces es el efecto placebo el que habla, la confianza en que va a funcionar o, simplemente, que algo cambió para bien en la forma de amamantar al tiempo que probamos uno de estos “trucos”.
Verduras de hoja verde oscuro para aumentar la producción de leche
La espinaca, la col rizada, el brócoli… Tradicionalmente se le atribuye a este tipo de verduras la capacidad de aumentar la producción de leche ya que contienen fitoestrógenos. Quizás por la similitud entre las estructuras químicas de los fitoestrógenos y los estrógenos humanos se cree que funcionan como galactogogos, pero esto no se ha demostrado. Es más, hay pruebas, aunque no muy consistentes, de que los estrógenos pueden disminuir la producción de leche (especialmente en las primeras semanas).
También contienen fitoestrógenos la soja o el té, y aunque su consumo está recomendado dentro de una dieta equilibrada, lo cierto es que no podemos asegurar que aumente la producción de leche. Incluso hay que tener cuidado con no abusar por ejemplo del té, por contener cafeína.
Beber agua, cerveza u horchata
Es cierto que cuando das el pecho te entra una sed horrible. Al menos las primeras semanas sientes que toda la leche que sale debe entrar multiplicada en agua y la botella se convierte en tu aliada inseparable. Pero aunque el organismo nos pida reponer el agua que gastamos al amamantar (el 88% de la leche materna es agua), no funciona igual a la inversa. Es decir, no por beber más líquido vas a tener más leche. Así que, hidrátate todo lo que necesites, pero para encontrarte bien, por salud, no confiando en que de este modo producirás más.
Otra de las bebidas que erróneamente se recomiendan para la producción de leche es la cerveza, por su contenido en cebada. Este cereal tiene mucha fibra y carbohidratos de absorción lenta, y algunos estudios afirman que la cebada germinada estimula la prolactina.
Aunque esta hormona incentiva que las glándulas mamarias fabriquen la leche, este incremento es mínimo y está supeditado a que tu bebé mame frecuentemente. Y por supuesto no justifica el consumo de alcohol durante la lactancia que, además de pasar a la leche, bloquea la hormona de la oxitocina pudiendo incluso reducir la salida de la leche.
La horchata de chufa es otro de los alimentos que ayudan a la producción de leche, según dicen. En España es una bebida típica valenciana y se realiza con chufas (pequeños tubérculos ricos en minerales con propiedades energéticas y diuréticas). En otros países como en México se le añade también arroz. Pero por muy energética e hidratante que sea, no va afectar para nada en la producción de leche. De hecho, no se recomienda abusar de esta bebida ya que contiene mucho azúcar.
Semillas, hierbas y algas, ¿alimentos que ayudan a la producción de leche?
Las semillas de lino y sésamo son otros de los alimentos a los que más se acuden cuando se quiere tener más leche. Son fuente de fibra y proteína, por lo que podemos incluirlas en la dieta para tener una nutrición equilibrada. Pero nuevamente no hay ninguna evidencia que relacione su consumo con la producción de leche.
En cuanto a las hierbas como el hinojo o el cardo mariano, las encontramos en muchos suplementos vitamínicos que aseguran aumentar la producción de leche. También se recomienda su ingesta en infusiones. Pero hay que tener mucho cuidado con su origen, ya que fácilmente pueden confundirse con otras plantas que sí son tóxicas. Además, de nuevo, insistimos en que no hay evidencia clara de que funcionen. En general, conviene tener mucho cuidado con las infusiones ya que, en función del reposo, pueden tener concentraciones variables y algunas de ellas están contraindicadas durante la lactancia.
Otros de los suplementos que actualmente están de moda son los que contienen algas como la espirulina o chlorella. Y aunque su consumo es bastante seguro para la lactancia, no hay certeza alguna de que uno de sus beneficios reales sea lograr que la mujer tenga más leche para su bebé.
¿Cómo aumentar la producción de leche materna?
La alimentación no va a influir en la cantidad de leche que tenga la madre, tampoco en la calidad. La mujer que amamanta debe comer bien para sentirse bien, por salud, porque está quemando muchas calorías, porque tiene que recuperarse de un parto, porque tiene una cría a la que alimentar y porque será el espejo del que su bebé tomará ejemplo para aprender a alimentarse. La leche de la madre no es mejor ni peor según lo que coma (aunque sí es cierto que, por ejemplo, el abuso de bebidas azucaradas puede ser perjudicial para el desarrollo cognitivo del recién nacido).
Por lo tanto, podemos olvidarnos también de los carísimos suplementos multivitamínicos durante la lactancia si la madre lleva una dieta equilibrada. Solamente estaría indicado, de forma individual, el yodo.
Si hay una succión y agarre adecuados y no se limitan las tomas, no hace falta aumentar la producción de leche de ninguna manera. Y es que el cuerpo sabe bien cuánta leche necesita tu bebé (por eso cuando son dos los bebés alimentados también hay leche suficiente). ¡Y no te fíes de lo que llegas a extraerte con el sacaleches! La succión del bebé es muchísimo más eficaz.
Salvo casos muy poco frecuentes de hipogalactia real e irreversible, siguiendo sencillas medidas que te pueden recomendar si consultas con especialistas (en la Tribu CSC, por ejemplo, contamos con la consultora de lactancia Inma Mellado y con varios Cursos Online con mucha información) la producción de leche será la adecuada para tu bebé.
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Recuerda que el pecho no es solamente alimento, también les aporta seguridad y consuelo, por lo que es lógico que quieran estar todo el día cerquita del pecho de mamá. Además la succión no nutritiva también es un estímulo para producir leche. Y si realmente la ganancia de peso es insuficiente es importante revisar punto a punto qué puede estar fallando (frenillo lingual corto, succión inmadura, mala posición…) y corregirlo.
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