Dermatitis del pañal: Causa y tratamiento

Artículo publicado el 14 Jun 2021 - Este artículo ha sido revisado y actualizado con fecha 5 julio, 2023

La dermatitis del pañal es una de las patologías más frecuentes durante los dos primeros años de vida del bebé. Aunque no es grave, sí genera muchas molestias en los pequeños, por lo que es importante seguir unas recomendaciones básicas para evitarla y, en caso de que aparezca, tratarla.

¿Qué es la dermatitis del pañal?

La dermatitis del pañal es la irritación o inflamación de la zona que queda cubierta por el pañal del bebé, afectando a los genitales y a las nalgas. En ocasiones se puede extender también a la entrepierna del bebé y a la parte más baja de la barriga. Aunque su nombre puede hacer pensar que es provocada por el uso del pañal, la realidad es que hace referencia más bien a la zona que queda cubierta por este.

Junto al enrojecimiento, podemos encontrar también sarpullido y descamación de la piel y la zona suele ser muy sensible al tacto. Además, tu bebé puede encontrarse más molesto de lo habitual, quejándose especialmente cuando le cambias el pañal.

Suele extenderse hasta los 15 meses y suele ser más frecuente en los niños con la piel sensible o con enfermedades de la piel previas como la dermatitis atópica o la dermatitis seborreica. Las causas de la dermatitis del pañal son diferentes, aunque la principal es que la zona suele estar siempre húmeda y tapada por el propio pañal, impidiendo que la piel respire.

 

 

A ello se suma la delicada y final piel del bebé y el efecto irritante que provoca la acidez de la caca y el amoníaco de la orina. Ambos maceran la piel, acabando con su efecto barrera y permitiendo el paso de microorganismos. No hay que olvidar que los recién nacidos mojan y manchan varios pañales al día o que estos permanecen puestos, en ocasiones, demasiado tiempo.

Hay que tener en cuenta también la aparición de posibles irritaciones a jabones, detergentes o lociones nuevos e incluso a pañales. Puede afectar también la llegada de la alimentación complementaria ya que, con ella, el contenido, la consistencia y la frecuencia de las heces cambia.

Los antibióticos acaban con las bacterias, pero no solo con las malas, también con las buenas. De ahí que es posible que si el bebé toma antibióticos por cualquier motivo, afecte a las bacterias que controlan el crecimiento de hongos, lo que puede provocar una dermatitis de pañal provocada por hongos. Esto puede incrementar el riesgo de diarrea, lo que no hace más que empeorar la situación debido a la acidez de las heces.

 

 

Además, debes tener en cuenta que si tomas antibióticos y amamantas a tu bebé, también hay mayor probabilidad de que sufra dermatitis del pañal.

¿Cómo curar la dermatitis del pañal?

El tratamiento de la dermatitis del pañal en los casos leves en los que no encontraremos más que un enrojecimiento e irritación de la piel, bastará con limpiar la zona con agua y jabón neutro, manteniéndola siempre bien seca. Además, puedes quitar el pañal a tu bebé por periodos cortos para evitar la humedad en la zona. Si pasados dos o tres días no ha mejorado, deberías acudir al pediatra para que valore la situación y te recete alguna crema en caso de ser necesario.

Sin embargo, es cierto que hay muchos tipos de dermatitis del pañal, como las candidiásicas con hongos o las infectadas con bacterias. En ambos casos, pueden aparecer ampollas o úlceras y es el pediatra quien debe pautar el tratamiento desde el primer momento. Se debe a que en función del tipo de afección, está indicada una crema concreta.

 

 

Eso sí, está desaconsejado el uso de los polvos de talco, habituales antiguamente para tratar la dermatitis.

¿Cómo evitarla?

La realidad es que evitar la aparición de la dermatitis del pañal es bastante sencillo. Basta con seguir unas recomendaciones sencillas:

• Cambiar el pañal con frecuencia. Es importante mantener la zona lo más seca posible. Por ello, hay que evitar dejar puesto el pañal demasiado tiempo, especialmente si este está manchado. No debemos confiar plenamente en la publicidad de algunas marcas que aseguran repeler la humedad durante un número determinado de horas. Así, es importante que estemos atentos y cambiemos el pañal de inmediato, especialmente cuando hace caca.
• Lavado frecuente con agua y jabón. Las toallitas húmedas han facilitado mucho la labor de limpiar la zona genital a nuestro bebé, pero la recomendación es usar siempre que sea posible agua tibia y jabón neutro, evitando las toallitas (especialmente si están perfumadas). Cuando hayas acabado, seca dando pequeños toques con una toalla suave de algodón, en lugar de arrastrar la toalla sobre la piel. También puedes dejar que se seque al aire.
• No aprietes el pañal en exceso ya que impedirás que pase el aire. Deberías poner meter un dedo entre el pañal y la barriga de tu hijo. Evita también las ropas ajustadas
• Quita el pañal. La mejor forma de evitar que aparezca la dermatitis del pañal es dejar que la piel respire, quitando el pañal siempre que sea posible. Puedes colocar a tu bebé sin pañal sobre una toalla grande o un paño para jugar o dormir la siesta por ejemplo.
• Uso de cremas. Aunque no es necesario usar cremas tras cada cambio de pañal de forma habitual, sí podemos aplicarlas si vemos que la piel de la zona se enrojece. Las cremas específicas para la dermatitis del pañal (conocidas como pastas al agua) actúan de barrera protegiendo la piel del recién nacido y, además de su efecto calmante, favorecen su cicatrización. Lo mismo ocurre con las que contienen óxido de zinc.
• Higiene de manos. Es importante que laves tus manos antes y después de cambiar el pañal a tu bebé para evitar así la propagación de bacterias o de hongos.

 

 

Sobre si es mejor el uso de pañales desechables o de tela, no hay consenso ni pruebas convincentes a la hora de recomendar uno u otro. Por ello, la mejor sugerencia es que uses el que mejor le funciona a tu bebé. Lo mismo ocurre con los jabones o las cremas, la recomendación es no usarlas, aunque no hay ningún problema si las utilizas. En cualquier caso, debes evitar siempre aquellas con perfumes o compuestos químicos.

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