Qué debes tener en cuenta después de que le pongan las vacunas al bebé

Aunque las vacunas son necesarias, en muchas ocasiones pueden ocasionar reacciones a los más peques. Por ello, es importante saber qué hay que tener en cuenta después de que le pongan las vacunas al bebé para poder reaccionar con rapidez y tranquilidad.

¿Qué hacer después de vacunar a un bebé?

El calendario de vacunación infantil en España establece que los bebés deben recibir sus primeras vacunas a los 2 meses. Y a pesar de que estas son seguras y eficaces para controlar y erradicar enfermedades, lo cierto es que, en ocasiones, pueden provocar algunos efectos secundarios.

Por este motivo, es recomendable permanecer en el centro sanitario donde se le ha administrado la vacuna unos minutos por si se produce alguna reacción para poder atender al bebé de inmediato. Y, sobre todo, consultar cualquier duda que tengas. 

 

 

Las reacciones a las vacunas en el bebé más frecuentes son el aumento de la temperatura corporal y el dolor y la hinchazón en la zona del pinchazo. ¿Qué podemos hacer después de una vacuna a un bebé?

Si tiene fiebre o febrícula

Aunque no todas las vacunas dan fiebre, es cierto que entre un 15 y un 20% de los bebés vacunados sufren un aumento de su temperatura corporal. En la mayoría de los casos es febrícula, pero, en otros, sí es fiebre e incluso puede pasar de los 39ºC.

La aparición de la fiebre no es siempre inmediata y depende del tipo de vacuna. Así, en el caso de la vacuna de los 2 meses, la temperatura tiende a subir al cabo de 6 o 7 horas. Mientras, en el caso de la triple vírica de los 12 meses, la fiebre aparece entre los 5 y los 10 días posteriores y puede ser algo más alta.

¿Debemos dar algo para tratar la fiebre? Pues aunque lo importante es diagnosticar qué causa esa fiebre y no bajar la temperatura, sí podemos tratar el malestar que provoca. Solo si la temperatura supera los 37,5ºC en axila, sí podríamos dar algún antitérmico como paracetamol.

 

 

Y a pesar de que algunos pediatras recomiendan dar el paracetamol justo después de recibir la vacuna y antes de que aparezca la fiebre, lo cierto es que no es lo más adecuado ya que se ha demostrado que esto podría disminuir la respuesta inmune a las vacunas. Así lo explica la pediatra Gloria Colli, a la que puedes consultar online en la Tribu CSC cualquier duda:

“Aunque el paracetamol es el analgésico de elección para tratar la fiebre o el dolor asociados a las vacunas, no se debe administrar paracetamol de forma “preventiva”. Administrado antes de la vacuna o justo después del pinchazo en un intento por prevenir la fiebre se sabe que puede disminuir la respuesta inmune de algunas vacunas, por lo que se desaconseja esta práctica”.

¿Cómo se le puede bajar la fiebre después de las vacunas a un bebé? En caso de que solo se presenten algunas décimas, podemos optar por medidas físicas como quitarle la ropa de más abrigo y dejarlo con ropa ligera y cómoda (no desnudo) o aplicar paños húmedos fríos. Además, es importante mantenerlo hidratado y mantener una temperatura adecuada en casa, sin mucho frío ni calor.

 

 

Aunque bañar al bebé con agua templada se considera un medio físico para bajar la fiebre, lo cierto es que no es recomendable ya que si el pequeño no se encuentra bien, puede resultarle contraproducente y desagradable. Por ello, si crees que es mejor no bañarlo después de la vacuna, no lo hagas. De hecho, ¡no es necesario bañar a los bebés pequeños a diario! 

Qué hacer después de poner las vacunas a un bebé en caso de somnolencia

En el caso de la vacuna de los 2 meses, es habitual que los bebés tengan especial somnolencia unas horas después del pinchazo. ¿Qué podemos hacer en estos casos? Nada más sencillo que dejarlos dormir todo lo que necesiten.

Así que si te preguntas si es bueno que después de las vacunas el bebé duerma, puedes estar tranquilo/a: no hay ningún problema en que se pase la tarde durmiendo. Eso sí, recuerda vigilarlo para controlar la temperatura y que esté bien hidratado.

 

 

Cuando hay dolor e hinchazón en la zona del pinchazo

Las vacunas en el bebé suelen provocar dolor local y una pequeña hinchazón en la zona del pinchazo. Para aliviarlo podemos aplicar frío, aunque es habitual que desaparezca por sí solo tras 24-48 horas.

Algunas sustancias que contienen las vacunas pueden provocar enrojecimiento, aunque no es frecuente. Como podría tratarse de una alergia, sería necesario consultar con el pediatra para que nos confirme a qué se debe.

 

 

¿Qué hacer después de vacunar a un bebé si está irritable?

Si nuestro bebé está especialmente irritable tras recibir la vacuna, deberíamos darle un “extra” de mimos: cogerle en brazos el máximo tiempo posible para que esté tranquilo, mecerle, cantarle, hablarle con suavidad, pasearle…

En caso de los niños algo más grandes, además de validar sus emociones y comprender el dolor causado por la vacuna, sí podemos explicarles la importancia de la vacunación para evitar enfermedades y contagios.

Aunque en principio no hay que modificar nada en la alimentación del peque y debemos seguir ofreciendo el pecho o el biberón a demanda, puede ocurrir que el bebé no quiera comer después de las vacunas. Puede deberse al malestar general, así que en ningún caso hay que obligarle a hacerlo.

 

 

¿Cuándo es necesario acudir al pediatra tras poner las vacunas al bebé?

Es probable que te preguntes cuánto tiempo dura el dolor de las vacunas en los bebés, sobre todo si tu peque no se encuentra del todo bien. Aunque cada niño es diferente, lo habitual es que el malestar se mantenga durante las primeras 24-48 horas.

En principio, todos estos síntomas son normales tras recibir una vacuna, por lo que no sería necesario acudir al pediatra. Solo si la fiebre sube a 40ºC o hay algún otro tipo de reacción, sí deberíamos consultar para valorar si esta se debe a la propia vacuna o bien a que el pequeño está enfermo por otro motivo. De confirmarse el primer caso, sería necesario hacer una declaración de reacción adversa a la vacuna para remitirla a los organismos competentes.

Además, deberíamos acudir a urgencias en caso de que aparezca dificultad para respirar, inflamación de la garganta, debilidad, mareos, palidez, taquicardia, vómitos persistentes o convulsiones, aunque son reacciones muy poco habituales.

 

 

¿Qué podemos hacer justo antes de poner las vacunas al bebé?

Pero si qué hacer después de poner las vacunas a un bebé genera dudas, no lo es menos el momento de antes. En caso de que se trate de un bebé, podemos entretenerlo con algún juguete o libro, y si es algo más mayor, sí sería interesante ser sincero y explicarle en un lenguaje adaptado a su edad qué son las vacunas, por qué son necesarias y que es posible que sienta algo de dolor.

Si tu peque está levemente enfermo no es necesario retrasar la vacuna, pero, ante la duda, informa siempre al personal sanitario sobre la situación para que te indiquen qué hacer.

 

 

¿Y durante?

La tetanalgesia suele ser uno de los mejores remedios para que las vacunas a los bebés duelan algo menos. Así que si te apetece, ¡no dudes en poner a tu peque en el pecho justo antes de que lo vacunen!

 

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