Vacaciones en la playa: 7 Días bajo el sol pueden arruinar el microbioma de tu piel

En las vacaciones de verano, la mayoría de las familias busca destinos de costa para disfrutar unos días de playa con los más pequeños. Ahora, un grupo de investigadores del Reino Unido nos advierte de que este tipo de viajes puede dañar el microbioma de la piel.

Si bien estos cambios no son permanentes, los científicos de la Universidad de Manchester señalan que los cambios rápidos en el microbioma de la piel son perjudiciales ya que nuestra piel tarda en recuperarse un par de semanas después de la exposición a los rayos ultravioleta (UV). Por lo tanto, el bronceado durante las vacaciones podría tener un impacto negativo en tu salud general.

Debido a la falta de estudios sobre cómo nuestro comportamiento influye en la salud de la piel, los investigadores del Reino Unido han examinado los efectos de los comportamientos de búsqueda del sol en la composición de la microbiota de la piel de los turistas.

 

 

Para ello examinaron la piel de una cohorte de turistas cuyo comportamiento de exposición al sol “afectaba significativamente a la diversidad y composición de la microbiota de su piel”, explica la Dra. Abigail Langton, investigadora principal de la Universidad de Manchester y autora del estudio publicado en Frontiers in Aging.

Los turistas nos exponemos al sol de forma intensa e intencionada, es decir, nos damos “baños de sol” para broncearnos. Algo que, según los científicos, le pasa factura a nuestra piel.

¿Qué es el microbioma de la piel?

La piel es el órgano más grande del cuerpo humano y alberga gran variedad de microorganismos que componen la microbiota de la piel. Entre otras cosas, estas poblaciones microbianas, que están organizadas en estructuras comunitarias complejas, protegen contra los patógenos.

 

 

Y ¿qué significa la palabra microbioma? ¿Qué se entiende por microbioma? En tanto el término microbiota hace referencia al grupo de diferentes microorganismos que viven en conjunto en un hábitat concreto (como los intestinos o la piel de los seres humanos), el término microbioma describe cómo esa comunidad de diferentes microorganismos interactúan entre sí y con las condiciones ambientales circundantes.

7 Días de vacaciones al sol dañan las bacterias de la piel

Los investigadores de Reino Unido estudiaron durante varios años la composición de la microbiota cutánea, y descubrieron que era especialmente vulnerable a la exposición solar intensa. Fue entonces cuando decidieron realizar un pequeño experimento antes de las vacaciones de verano, con la ayuda de 21 turistas.

Antes de las vacaciones en destinos soleados, que duraban al menos 7 días, los investigadores analizaron la piel de los participantes. La microbiota de la piel está compuesta en gran parte por 3 comunidades bacterianas en la superficie: Actinobacteria, Proteobacteria y Firmicutes. El día 1, 28 y 84 después de las vacaciones, se evaluó nuevamente la microbiota cutánea de los participantes.

 

 

Además, a cada turista participante en el estudio se le asignó un grupo en función de la respuesta de bronceado individual:

• Dos grupos fueron clasificados como “buscadores del sol”:
  • Ocho, que se broncearon durante las vacaciones, fueron considerados “buscadores”.
  • El grupo “bronceados” estaba formado por 7 personas que ya partían de tener un bronceado y lo mantuvieron durante sus vacaciones.
• Los 6 participantes restantes fueron considerados “evitadores”.
  • Su tono de piel era el mismo antes y después de las vacaciones.

“Este estudio se realizó en turistas de la vida real y proporciona información importante sobre cómo la exposición al sol que produce una respuesta de bronceado, incluso durante un período soleado relativamente corto, puede conducir a una reducción aguda en la abundancia de proteobacterias, lo que disminuyó la diversidad de la microbiota de la piel“, explicó el Dr. Thomas Willmott, autor principal del estudio e investigador de la Universidad de Manchester.

 

 

Tomar el sol de forma prolongada provoca daños en el ADN de las células de la piel, inflamación y envejecimiento prematuro de la piel

La exposición prolongada a la radiación ultravioleta está asociada con daños en el ADN de las células de la piel, inflamación y envejecimiento prematuro de la piel. A pesar de ello, los comportamientos intencionales de búsqueda del sol siguen siendo comunes.

“Hemos demostrado que el desarrollo de un bronceado se asocia con una menor abundancia de proteobacterias inmediatamente después de las vacaciones“, escriben los autores del estudio. La buena noticia es que la piel se recupera semanas después.

¿Cómo se puede recuperar el microbioma de la piel?

A pesar de los cambios observados en los “buscadores de sol”, según los investigadores “la microbiota de todos los turistas se recuperó unas semanas después de que dejaron de pasar largos períodos de tiempo al sol”.

 

 

A pesar de la rápida reducción de las proteobacterias y el consiguiente cambio en la diversidad de la microbiota de la piel, la estructura de la comunidad bacteriana se recuperó 28 días después de que las personas regresaran de sus vacaciones.

“Esto indica que la exposición a los rayos UV durante las vacaciones tiene un efecto agudo en la microbiota de la piel, pero la recuperación es relativamente rápida una vez que la persona regresa a un clima menos soleado”, explica Willmott.

Las proteobacterias dominan la microbiota de la piel. En consecuencia, “no sorprende que haya una recuperación rápida de la microbiota para restablecer las condiciones óptimas de funcionamiento de la piel”, señala Langton. Los autores afirman que lo que podría ser más preocupante es la rápida alteración de la diversidad de la microbiota, que se ha relacionado con estados de enfermedad.

 

 

La alteración de la microbiota puede causar problemas de salud

¿Cómo afecta la microbiota en la piel? Una disminución en la riqueza bacteriana de la piel, por ejemplo, se ha asociado previamente con dermatitis. La fluctuación en la diversidad de proteobacterias se ha asociado específicamente con problemas de la piel como el eccema y la psoriasis.

Los investigadores reclaman más estudios futuros para averiguar por qué las proteobacterias parecen ser particularmente sensibles a la UVR y cómo este cambio en la diversidad afecta a la salud de la piel a largo plazo. “Idealmente, tales estudios tendrán como objetivo aumentar la cantidad de participantes para permitir más información”, manifiesta Langton.

Consecuencias de una microbiota desequilibrada

La flora cutánea desempeña un papel importante en la preservación de la salud y en el origen de enfermedades. Si el ecosistema de la piel está alterado, hay más probabilidad de que se produzcan problemas como descamación, picor, dermatitis atópica o rosácea.

 

 

Diversos factores pueden romper este equilibrio: seguir una dieta desequilibrada rica en grasas o azúcares, la toma de antibióticos, la contaminación, el estrés o los hábitos de higiene (el exceso de lavado o las limpiezas agresivas puede alterar el pH de la piel, así como el uso de cualquier jabón, crema, maquillaje, perfume o producto que irrite la piel).

Para mantener una piel sana y capaz de hacer frente a las agresiones externas, debemos mantener un nivel de hidratación adecuado y reforzar la barrera cutánea para que su flora pueda cumplir su doble función de barrera física e inmunológica. Para ello, es fundamental el uso de emolientes tras el baño o ducha, especialmente en casos de dermatitis atópica y otras afecciones.

La exposición al sol puede hacer que la microbiota de la piel se desequilibre y que provoque rojeces en la piel, piel sensible, sequedad… Por este motivo es importante no exponer demasiado directa e intensamente la piel a los “baños de sol” y protegerla adecuadamente. ¿Sabías que a la sombra, bajo la sombrilla, también nos bronceamos?

 

 

Otras cuestiones a tener en cuenta es el tipo de jabones y detergentes que utilizamos. Es fundamental respetar el pH de la piel, que es aproximadamente de 5.5. Por ello hay que rechazar los jabones alcalinos.

Los perfumes y maquillajes también pueden alterar el hábitat cutáneo, por lo que es conveniente dar descansos a la piel de vez en cuando respecto al uso de cosméticos.

Y, por último, el descanso y la alimentación equilibrada también son buenos aliados para la piel de nuestra familia.

Si quieres más información o necesitas asesoramiento profesional sobre cómo proteger la piel de tu familia de la exposición solar, en la Tribu CSC puedes consultar online a nuestro equipo de expertos/as en salud materno-infantil y crianza respetuosa. Entre ellos/as se encuentra la pediatra Gloria Colli.