Dónde es mejor ir de vacaciones con niños alérgicos o asmáticos, ¿a la playa o a la montaña?

Puede que estéis aún decidiendo dónde ir a pasar las vacaciones de este verano. A no ser que seamos unos enamorados de la montaña o la playa, si no tenemos ninguna predilección en concreto, quizá a veces nos cueste decidir si este año vamos a la playa o a la montaña. Con niños asmáticos o alérgicos, ¿playa o montaña?

Recomendaciones para viajar con niños alérgicos o asmáticos

Escojáis lo que escojáis, sobre todo si vivís en un entorno urbano, lo mejor que podréis hacer es reservar unos días en un destino en el que tengáis contacto con la naturaleza y huir un poco de altas concentraciones de contaminación. Los peques disfrutan mucho de ver plantas, animalitos, de poder correr en espacios grandes y naturales…

Esos entornos facilitan el tomar momentos para hacer actividad física en familia (tan necesaria como es para ayudar a gestionar enfermedades respiratorias como el asma o las alergias). ¡El intentar evitar o limitar la actividad física a personas con asma es un mito! Cuando son muy bebitos no podemos hacer mucho más que dejarles con su movimiento libre, pero a medida que van creciendo, a todo niño y niña habría que proponerles juegos de movimiento, deportes… Aún más si tienen enfermedades respiratorias crónicas, ya que nos ayudan a limitar sus efectos.

 

 

Además, los entornos naturales tienen el don de disminuir el estrés y, por ende, mejoran nuestro sistema inmune. Así que, aunque seáis muy urbanitas, no dudéis en apostar de vez en cuando por destinos rodeados de naturaleza.

Niños asmáticos o alérgicos: ¿Playa o montaña?

En general, se tiende a recomendar los destinos de media montaña, en caso de padecer asma o alergias. En Francia, muchos antiguos balnearios y centros de reposo se han convertido en centros de rehabilitación respiratoria, y su ubicación de preferencia son lugares de montaña.

Aun así, os hablaré de ciertos beneficios que podemos encontrar si nos decidimos por destinos de playa:

• Nos permite zambullir a nuestros peques y sacar cantidades ingentes de moco que estaba atrapado en cavidades recónditas de sus narices. Sí, el agua de mar, con su alta concentración de sal, es el suero hipertónico más natural que existe. Y nos puede ayudar muchísimo a limpiar bien la nariz. Puede veniros bien si habéis pasado por una primavera con mucha rinitis o muchos resfriados. Evitaréis tener que hacer lavados nasales. El mar los hará por vosotros.
• En la orilla del mar, la brisa tiende a dispersar pólenes que podrían generar alergias, así que si estamos en época de polinización quizá ir cerca del mar ayude a contener ciertas alergias al polen.
•  Otra ventaja del mar (para la población con enfermedades respiratorias crónicas, pero que rara vez afecta a bebés y niños y niñas con asma o alergia) es que al estar a mucha menos altura que la montaña, la concentración de oxígeno es mayor. La cantidad de oxígenos es siempre del 21% en cualquier parte de la atmósfera, pero cuanta más presión atmosférica, más juntitas están las partículas. Y cuanto más arriba de la montaña vayamos, más cantidad de aire tendremos que respirar para conseguir el mismo oxígeno, porque al tener menos peso del aire sobre nosotros, las partículas de aire y de oxígeno estarán más separadas.

 

 

Vamos a ver ahora las razones para escoger la montaña para las vacaciones de niños y niñas con asma y alergias. Casi todas ellas están relacionadas en mayor o menor medida con la humedad. O la falta de ella… La humedad son partículas de agua en suspensión, mezcladas con los gases del aire:

• Los pacientes con asma suelen describir el aire de la montaña como más fácil de respirar que el que está cargado de humedad.
• La sequedad suele ayudar a contener la producción excesiva de secreciones (tanto pulmonares como nasales).
• La sequedad del ambiente limita la proliferación de hongos.
• Entre 1.500 y 2.000 metros de altura el tiempo de polinización es muy corto.

Eso sí, debéis tener en cuenta que, a veces, la falta de humedad del ambiente de la montaña puede ser un problema para aquellas personas que presentan ya de por sí problemas de sangrado de nariz (epitaxis).

Como veis, no hay ningún lugar perfecto para todos…. Para solucionar este pequeño inconveniente, tanto si alguien de la familia sangra como si “simplemente” notáis mucho moco seco o tapones de moco, podéis hacer lavados nasales como soléis hacer y si no es suficiente, podéis probar a hacer algún lavado con sueros que contengan ácido hialurónico, que hidrata las mucosas y que podréis encontrar en farmacias. Si tenéis dudas al respecto, puedo ayudaros a resolverlas en la Tribu CSC. 

 

 

3 imprescindibles para unas vacaciones con niños asmáticos o alérgicos

En cualquier caso, escojáis el destino que escojáis para pasar vuestras vacaciones de verano con niños alérgicos o asmáticos:

1. Pensad en poner la medicación en la maleta (tanto la de base como la de rescate).
2. Hidrataros todos bien. Las altas temperaturas, sea donde sea, favorecen la deshidratación. Y en la montaña más, porque ya hemos visto que es un lugar más seco.
3. Tanto si vais a ir a la playa, o a la montaña o en un destino más bien urbanita, si vais a ir a alguna casa o caravana o sitio que no se haya utilizado ni ventilado recientemente, evitad ir directamente con vuestro peque si es alérgico. Podríais tener algún susto, si primero no os aseguráis de limpiar bien de polvo (con sus ácaros) o de restos de hongos por humedades.

¡Ojalá os sirva toda esta información y paséis unas maravillosas vacaciones!