Según la Teoría de las Inteligencias Múltiples del psicólogo Gardner, los niños y niñas tienen no solo una, sino hasta al menos 8 inteligencias diferentes que podemos ayudarles a descubrir, explorar, desarrollar y potenciar mediante…
Artículo publicado el 20 Dic 2022 - Este artículo ha sido revisado y actualizado con fecha 18 diciembre, 2023
A medida que los peques crecen, el juego va cambiando convirtiéndose cada vez en más complejo. ¿Quieres acertar con el regalo de tu peque esta Navidad? Te explicamos las etapas del juego según Piaget en función de su edad.
Claves para elegir los juguetes
Los juegos son esenciales en la infancia ya que ayudan al desarrollo de la personalidad e inteligencia de los más peques. Con ellos aprenden y procesan toda la información que les rodea. Pero, ¿qué podemos regalar a un niño? En ocasiones, nos lanzamos a comprar juguetes para peques sin pensar en su edad o en sus gustos y preferencias, lo que puede provocar que apenas jueguen un día con ellos para quedar olvidados en el cajón.
Por ello, resulta fundamental observar a nuestros hijos e hijas para elegir aquello que les apasiona y no dejarnos llevar por nuestros propios criterios. Así, según explica la terapeuta ocupacional pediátrica de CSC, Jéssica Romero, a la que podéis consultar online en la Tribu CSC:
“Observar y conocer muy bien a nuestro pequeño, sus habilidades motrices, manipulativas, su madurez e intereses, es clave a la hora de acertar con el objeto y juguete que regalamos.
Ajustar las expectativas en cuanto a cómo debería ser el juego de nuestro niño también lo es. Como adultos, solemos tener una idea de juego que consideramos como ideal, pero que muchas veces se aleja mucho de la realidad de los proyectos que les interesan o emprenden nuestros hijos.
¿Cuántas veces nos ha pasado que regalamos algo que nos parece un juguete magnífico y nuestro peque disfruta mucho más apilando los tuppers que tenemos en la cocina? Ahí nos está dando una pista de lo que le interesa en ese momento: apilar, meter y sacar. Busquemos qué objeto le permite hacer eso y desarrollar la habilidad que le toca en ese momento y que trata de perfeccionar”.
Además, hay que tener en cuenta la edad recomendada para cada juguete. Aunque parece una cuestión baladí, lo cierto es que no es arbitrario. De hecho, y aunque lógicamente el ritmo evolutivo de cada niño o niña puede variar, a grandes rasgos, cada etapa de la infancia tiene unas características, unas necesidades y unas habilidades diferentes.
Y los juegos deben ir orientados a ayudar a los peques a estimular todo su potencial y su aprendizaje, de forma que a cada rango de edad le correspondería una fase de juego que no puede saltarse: es imprescindible superarla para poder pasar a la siguiente. Es lo que se conoce como las etapas del juego de Piaget y, por ello, es importante no regalar juguetes que estén recomendados para edades más avanzadas.
¿Cuáles son las etapas del juego según Piaget?
Jean Piaget (1896-1980) fue un psicólogo conocido por sus estudios sobre la infancia y su teoría de que la dificultad de los juegos van en concordancia con el desarrollo de la inteligencia de los niños. Y ¿qué dice Piaget sobre el juego y el aprendizaje? Según explicaba:
“El niño tiene que jugar porque la realidad le desborda, no puede interactuar, le falta información para poder procesarla y, por tanto, crean la suya en función de los conocimientos que va adquiriendo“.
¿Cuáles son las etapas del juego?
Para adaptarse a esa realidad, los niños pasan por 3 etapas que se repiten de forma cíclica: asimilación, acomodación y equilibración.
- Asimilación: el niño recoge conocimiento de su entorno externo adaptándose a él y recibiendo experiencias, encajando todos sus conocimientos anteriores con los presentes.
- Acomodación: la niña modifica su estructura de pensamiento u organización cognitiva para incorporar las experiencias externas.
- Equilibración: en esta fase, los peques equilibran la asimilación y la acomodación, es decir, hasta que no ha acomodado lo asimilado, no puede comenzar de nuevo el proceso de asimilación.
Aunque hay muchos psicólogos que han estudiado los tipos de juegos infantiles más adecuados para cada etapa de la infancia, Piaget, junto a María Montessori, destaca especialmente, convirtiéndose en una pieza fundacional de la Psicología del Desarrollo y ejerciendo gran influencia en psicólogos y pedagogos. De hecho, su trabajo ha servido como base para otras investigaciones más actualizadas sobre la forma en que los niños crecen, se desarrollan y aprenden.
Eso sí, mientras el primero se centró en estudiar el tipo de acciones y aplicación en el desarrollo intelectual de los niños y niñas, Montessori se centró en los métodos y herramientas para que estos sintieran que controlaban su propio mundo, ofreciendo materiales prácticos para la vida diaria como regalo, favoreciendo la autonomía del niño en las diferentes etapas.
Pero ambos coincidían en lo más básico: el juego como hilo conductor en el desarrollo.
Las cuatro etapas del juego según Piaget
Según Piaget, las fases de desarrollo cognitivo o inteligencia de los niños se pueden dividir en 4 etapas:
- Fase sensoriomotora: hasta los 2 años.
- Fase preoperacional: de los 2 a los 6 años.
- Fase de las operaciones concretas: de los 6 a los 12 años.
- Fase de las operaciones formales: a partir de los 12 años.
Y ¿cuáles son los tipos de juego según Piaget? El juego funcional, de construcción, simbólico y de reglas. Veamos ahora cómo adaptarlos según las etapas de desarrollo de nuestros peques:
Fase sensoriomotora
La fase sensoriomotora abarca desde el nacimiento hasta los 2 años, una etapa en la que el tipo de juegos debería ser funcional o de construcción. Aunque durante sus primeros meses de vida es cierto que un recién nacido no necesita juguetes, poco a poco va relacionándose a través de las percepciones que recibe. Y esta habilidad va a más a medida que va desarrollando su capacidad motora.
En esta etapa, los tipos de juego según Piaget consisten, básicamente, en escuchar sonidos y tocar, manipular objetos, morder y probar diferentes texturas con las manos o los pies, centrándose por tanto en la coordinación y estimulación de los sentidos. Predomina el componente físico y, por tanto, el desarrollo motor es clave.
Así, en este momento se balancean, arrastran o voltean como parte del juego sin necesidad de juguetes. Eso sí, aún no son conscientes de que aquello que desaparece sigue existiendo. En otras palabras: lo que no ven, no existe para ellos.
Algunos elementos y objetos interesantes para ofrecer en esta etapa pueden ser:
- Sonajeros y otros elementos no muy pesados y fáciles de sostener como aros, recipientes, etc., mejor de materiales naturales como la madera, mimbre, bambú o textiles, ya que son seguros para que el bebé pueda llevarlos a su boca y muy ricos en texturas, lo que aporta mucha información sensorial.
- Objetos que animen al desplazamiento como un rodarí, palo de lluvia o coche. Para esto, es mejor que se muevan en una sola dirección y no muy rápido al principio para que así el bebé no se frustre y se anime a atraparlos.
- Los móviles tipo Montessori al inicio suelen resultarles muy atractivos visualmente. Son preferibles a los que tienen música y sonidos, que pueden sobrecargar sensorialmente al bebé.
- Pequeños encajables de formas básicas (círculo, cuadrado, triángulo), objetos para meter y sacar (alguna de las variadas cajas de permanencia, arandelas o piezas en su eje, cubiletes apilables) son ideales en esta fase del desarrollo. La habilidad manipulativa que tenga nuestro bebé nos indicará el tamaño o la forma a elegir.
- Para potenciar sus habilidades de coordinación, equilibrio y el trepar, se puede ofrecer la tabla curva, triángulo o cubo Pikler e incluso, dependiendo de la soltura de nuestro peque, un correpasillos o bici de equilibrio.
Para que vaya iniciándose en la participación de actividades cotidianas con los mayores, cosa que suele gustarles mucho, potenciando así sus habilidades de autonomía, una torre de aprendizaje puede ser un gran regalo, así como los kits Montessori para jugar con el agua, limpiar la mesa o cortar fruta, que podemos ofrecer cerca de los dos años.
Fase preoperacional
La fase preoperacional se extiende desde los 2 a los 6-7 años y se caracteriza por el juego simbólico. Los niños y niñas en este momento tienden a imitar todo lo que ven, así que repetirán constantemente en forma de juegos actos de la vida cotidiana adoptando diversos roles.
Por ello, jugarán a ser médicos, veterinarios, profesores, a cuidar a un muñeco como si fuera un bebé, conducir coches o cocinar. Como curiosidad, el juego simbólico es uno de los que realizan sin que nadie se lo enseñe y, lo mejor, mientras practican, aprenden.
Sobre los 2 años, piensan que los juguetes (o cualquier otro objeto) tiene los mismos sentimientos y percepciones que las personas. Además, son especialmente egocéntricos (piensan que todo gira en torno a ellos/as) y la fantasía forma parte de su día a día.
Así, es habitual que se pasen el día construyendo y destruyendo, y que cualquier caja se convierta en coches o castillos. Con unas habilidades sociales, cognitivas y físicas aún limitadas, tiende a ser un juego muy independiente aún. Sin embargo, es clave ya que permite al niño pensar, concentrarse, explorar y crear, a la vez que se prepara para relacionarse con otros niños mediante el juego.
En torno a los 3 años pueden aparecer los amigos imaginarios dando lugar a una etapa algo más compleja en lo que al juego se refiere. Sobre los 4 años, tienden a pasar del juego simbólico a juegos imaginarios en grupo.
En esta etapa serían interesantes los siguientes juguetes y objetos:
- Los “no juguetes” o elementos desestructurados ayudan a potenciar esta creatividad y juego simbólico, permitiéndoles inventar historias de todo tipo, construir y destruir a placer.
- Cocinitas, banco de herramientas o kits para limpiar suelen gustarles muchos en esta etapa en la que quieren imitar al adulto. También las casas de muñecas.
- Los muñecos, a los que les encantará cuidar como sus papás hacen con ellos, pueden ser muy interesantes. Los sexuados y de diferentes etnias pueden ser una buena idea.
- Disfraces y otros elementos con los que simular ser cualquier otra persona, animal o ser.
- Se pueden incluir juegos de mesa cooperativos y de competición en estas edades.
- Bicicletas con pedales y patines siguen potenciando las habilidades motrices globales de los peques en esta etapa.
- Kits o bastidores Montessori de apertura y cierre de broches, botones, nudos y lazos; y otros que facilitan la participación del peque en tareas de aseo o en la cocina, continuarán fomentando su autonomía.
Fase de las operaciones concretas
Entre los 6-7 y los 12 años tiene lugar la fase de las operaciones concretas. Poco a poco, el peque va aplicando la lógica a su día a día, aunque con las limitaciones propias de la edad, necesitando situaciones concretas y no abstractas. Así, la realidad va llegando a sus juegos y comienzan a construir coches, barcos o cualquier otro tipo de estructura sencilla, que se va convirtiendo en más compleja a medida que cumplen años.
En este momento suelen empezar a interesarse por aquellos juegos que tienen unas reglas por cumplir y, por tanto, pasan del juego individual al colectivo.
Juegos de mesa, circuitos, de habilidad… Poco a poco, los peques van adquiriendo un pensamiento cada vez más lógico, lo que les permite también identificar diferentes perspectivas en cada situación del juego o adelantarse y adivinar qué puede ocurrir en función de su experiencia anterior o la intuición. Es el momento de compartir, negociar, respetar turnos o ponerse en el lugar del otro.
Y si no ha aparecido antes, sobre los 8-9 años es el momento de la competitividad y de querer ganar siempre, especialmente en las actividades deportivas. También es el momento en el que se despierta el interés por la lectura, según Piaget. Sin embargo, en Criar con Sentido Común somos firmes defensores de la enorme importancia de la literatura y los cuentos infantiles, que pueden introducirse desde muy pequeños para fomentar el amor por la lectura y ayudar a explicar a los más peques conceptos algo complicados a través de la fantasía y la magia.
En este momento podrían mostrar intereses por:
- Juegos de mesa.
- Juegos de construcción más complejos, siguiendo modelos, con piezas superpuestas, más pequeñas.
- Elementos para crear: pinturas de todo tipo, para hacer manualidades, coser…
- Elementos para actividades deportivas de su interés.
Etapas del juego de Piaget: Fase de las operaciones formales
A partir de los 12 años y en adelante, Piaget habla de la fase de las operaciones formales. En lo que él considera la última fase del desarrollo cognitivo, los niños y niñas adquieren una visión cada vez más abstracta de su universo, siendo capaces de aplicar al razonamiento lógico para crear patrones de comportamiento. Así, crean conjeturas, probabilidades y establecen la relación causa-efecto para solucionar problemas. En este momento, aparece también la capacidad para argumentar y debatir.
Por tanto, en esta etapa suelen interesarse por juegos en grupo con reglas cada vez más complejas en las que sea necesario aplicar la lógica, con un análisis metódico y estrategia. Y gracias a ellos, aprenden sobre socialización, dejando de pensar como un “yo” para pasar a “nosotros”, según Piaget. Aunque pueden seguir presentes las etapas anteriores con juegos funcionales, simbólicos y de construcción, estos se hacen cada vez más complejos, llevándoles a encajar, apilar o ensartar todo tipo de piezas para hacer grandes construcciones.
¿Qué le podríamos regalar en este momento?
- Seguiríamos en la misma línea de lo anterior, pero incluiríamos juegos que fomenten sus habilidades críticas, de razonamiento lógico, incluyendo valores como el reciclaje, educación en valores, alimentación sana, razonamiento lógico-matemático…
- Experiencias compartidas con la familia y amigos como ir al teatro o alguna actuación y otras actividades de su interés.
- A estas edades ya suelen pedir prendas de vestir y objetos que desean.
Si tienes más dudas sobre qué regalar a tu hijo en Navidad y acertar en función de su edad y momento de desarrollo, en la Tribu CSC cuentas con un equipo de expertos que pueden ayudarte online. Entre ellos, se encuentra la terapeuta ocupacional pediátrica Jéssica Romero y la psicóloga infantil y logopeda, Elena Mesonero.
Buenas noches, me gustaría citarlos en mi trabajo de investigación. Me podría compartir de qué libro de Piaget obtuvieron la información?