Causas y tratamientos de la infección de orina en niños pequeños

La infección de orina en niños pequeños es una de las enfermedades más comunes en la infancia. En bebés y en lactantes la fiebre es la señal principal de este tipo de patologías. Antes de los seis meses es más frecuente en niños y partir del año, en niñas. En este post os hablamos de sus causas y tratamientos. La infección de orina es una de las infecciones bacterianas más frecuentes en pediatría. Es “potencialmente grave” en menores de tres años y “especialmente grave” para los bebés de menos de tres meses, según este artículo de Anales de Pediatría publicado en 2019.

“Afortunadamente, las infecciones de orina no son tan frecuentes (solo representan la causa del 7% de los procesos febriles sin foco) y con los cuidados actuales se diagnostican con facilidad y rapidez, por lo que las secuelas son mínimas”, explica en el blog la pediatra Gloria Colli.

Esta profesional forma parte del equipo de Criar Con Sentido Común y podéis consultar con ella y buscar asesoramiento sobre salud infantil a través de la Tribu CSC.

Causas de la infección de orina en niños pequeños

La infección de orina en niños pequeños viene producida por la concentración de gérmenes en el tracto urinario. La vía de llegada habitual es desde el intestino.

 

 

Los microorganismos colonizan la uretra o la zona perineal y producen la infección:

“Pero esto no se debe a una mala higiene ni sucede porque dejemos mucho tiempo al bebé con el pañal sucio. Requiere que se den varias condiciones que dependen del tipo de bacteria, de las características de la orina y de la capacidad de defensa de las vías urinarias”, aclara Gloria Colli.

En el periodo neonatal o en circunstancias muy concretas, la infección puede producirse por vía hematógena. Los estudios epidemiológicos realizados en España y citados en el artículo de Anales de Pediatría apuntan a que entre el 60 y el 80% de las infecciones urinarias en niños pequeños se produce por la bacteria Escherichia coli. El resto de microorganismos son poco frecuentes y se las considera “atípicas”.

¿Por qué es importante la detección precoz en bebés y niños pequeños?

El principal riesgo de una infección de orina en niños pequeños es que si no se trata adecuada y rápidamente puede provocar que se vea afectado el riñón. Tal y como explica Gloria Colli,

“A estas edades (antes de los cinco años), el riñón en crecimiento puede alterarse definitivamente y dejar secuelas de por vida. En estos casos es necesario un tratamiento intravenoso lo antes posible para evitar una mala evolución”.

 

 

Existen, por otro lado, algunos factores que pueden favorecer la infección urinaria en niños pequeños:

• Factores inmunitarios, urodinámicos e incluso genéticos.
• La fimosis en lactantes varones. 
• Anomalías en el tracto urinario.
• El estreñimiento también puede multiplicar el riesgo.

Por otro lado, hay estudios que evidencian que la lactancia materna durante más de seis meses previene las infecciones de orina en niños pequeños.

Síntomas de infecciones urinarias en la infancia

La edad es importante en la detección de la infección de orina en niños pequeños. A menor edad, más inespecíficos son los síntomas.

No obstante, la fiebre sin foco suele ser una señal de la existencia de una infección de este tipo. Esto no significa que si hay un foco no pueda haber infección del tracto urinario, pero sí se reduce la posibilidad de que se trate de una. A la fiebre se suman otras señales como dolor al orinar, orina maloliente o necesidad de ir al baño con mucha frecuencia.

 

 

En el caso de bebés estos síntomas pueden pasar desapercibidos. Por eso, según la pediatra Gloria Colli, hay que estar pendientes de otros síntomas como irritabilidad, llanto, rechazo del alimento, vómitos o diarrea. “Pero estos síntomas aislados, en ausencia de fiebre, es rarísimo que se deban a una infección de orina”. 

Tratamiento de la infección de orina en niños pequeños

“El diagnóstico en un bebé o niño pequeño que lleva pañales es bastante complicado. Para estar seguros de que hay una infección de orina es necesario hacer un cultivo“, según la pediatra de Criar Con Sentido Común

Una vez que se ha determinado la presencia de una infección de orina en niños pequeños, el pediatra decidirá el tratamiento con antibióticos. El objetivo no es únicamente aliviar los síntomas, sino prevenir el riesgo de sepsis y disminuir la posibilidad de complicaciones. Cuanto antes se instaure el tratamiento (tras la recogida de muestras), mejor.

 

 

La mayoría de niños es tratado de forma ambulatoria y por vía oral. Generalmente se reevalúan clínicamente a las 48 horas. En casos determinados es posible que se indique la hospitalización. Entre esos casos, si el bebé tiene menos de tres meses; si hay riesgo de sepsis; cuando aparecen vómitos, deshidratación o el peque no tolera el medicamento oral; o si este fracasa.

Hay que tener en cuenta, por último, que existe un 30% de riesgo de que se repita la infección de orina durante el primer año. Por eso, la recomendación de Gloria Colli es que, si aparece nuevamente la fiebre, esta sea “cuidadosamente valorada” teniendo en cuenta los antecedentes.

 

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