Vapear puede provocar bronquitis y otros síntomas respiratorios en jóvenes

Un estudio del Centro de Investigación del Tabaco de la Universidad de Ohio, en Estados Unidos, alerta del riesgo que corren los adolescentes que vapean de sufrir problemas respiratorios persistentes. En concreto, vapear se relaciona con la bronquitis y con dificultades para respirar.

Alrededor del 20% de los participantes, con una edad media de 17 años, desarrolló síntomas de bronquitis tras el consumo de cigarros electrónicos.

Riesgo para la salud del vaper o cigarro electrónico

Cada vez es más patente que el uso de vapers o cigarro electrónico no es inocuo para la salud. Aunque en un principio se lanzaron al mercado como una alternativa al tabaco tradicional, hoy en día se conoce que es igual de nocivo, incluso los que no tienen nicotina. Vapear puede provocar problemas de salud dental, puede crear adicción y, según este estudio, también está relacionado con la bronquitis y otros problemas respiratorios.

 

 

De hecho, ya existe una enfermedad respiratoria grave provocada por el vapeo: la EVALI (por sus siglas en inglés e-cigarette, or vaping, product use–associated lung injury). Una enfermedad que provoca lesiones pulmonares y que ha llegado a provocar la muerte a personas jóvenes, al menos en Estados Unidos.

En 2019 fue la primera vez que los Centros para el Control de Enfermedades de Estados Unidos alertaron sobre la presencia de la Evali. Se detectaron 2.500 hospitalizaciones y 54 muertes por esta extraña enfermedad.

Los adolescentes y el vapeo

La pediatra de Criar Con Sentido Común, Gloria Colli, a la que podéis consultar online en la Tribu CSC, resalta que los cigarrillos electrónicos

“son actualmente la forma más común de consumo de tabaco entre adolescentes. Aunque se han promocionado como una forma de dejar de fumar, no hay datos que concluyan que son efectivos para este objetivo, incluso algunos estudios indican que es todo lo contrario“.

Según algunos estudios, las principales razones por las que fuman los adolescentes son: grado de placer (P< 0.001), curiosidad, influencia de los pares, rebeldía, insatisfacción con el medio que lo rodea y la familia.

 

 

Durante 2023 se dieron a conocer los datos de la Encuesta de la Semana Sin Humo 2023 en España, según la cual, el 20% de los adolescentes entre 14 y 18 años vapea. Alrededor de un 14,3% utiliza cachimbas y un 13,1% cigarros convencionales. Además, el 7,5% de ellos mezcla el tabaco con cannabis.

El tabaco es la segunda droga más consumida por los menores, después del alcohol. Y el problema es que el marketing del vapeo y de la industria tabacalera ha puesto el punto de mira en los más jóvenes. Distintos expertos alertan de que el inicio en el tabaco es cada vez más temprano (antes de los 11 años) y de cómo se utilizan trampas como vapeadores infantiles para animar a niños y niñas a utilizarlos.

Vapear y bronquitis: Estudio realizado en Estados Unidos

Un nuevo informe trae ahora más evidencia de lo perjudicial que es el vapeo para los adolescentes. El estudio se ha publicado en la revista Thorax y en él han participado investigadores del Centro de Investigación del Tabaco del Centro Oncológico Integral de la Universidad Estatal de Ohio – Hospital Oncológico Arthur G. James y el Instituto de Investigación Richard J. Solove (OSUCCC – James), así como la Facultad de Medicina Keck del Sur de California.

 

 

Los estudios realizados para este informe demuestran que los adolescentes que vapean tienen riesgo de sufrir síntomas respiratorios persistentes, incluidos síntomas de bronquitis y dificultad para respirar.

Y estos efectos negativos se producen independientemente de si estos jóvenes fuman tabaco tradicional o no o si mezclan la nicotina con cannabis. Otros estudios ya habían demostrado que el aerosol de los vapers contiene sustancias que dañan los pulmones, incluidos saborizantes y metales oxidantes con conocida toxicidad pulmonar.

La investigación se desarrolló entre 2014 y 2018, en 4 oleadas. En total, participaron más de 2.000 jóvenes. La media de edad de los participantes era de 17,3 años. La mayoría eran hispanos blancos, mitad varones, mitad mujeres. Los investigadores recogieron las respuestas de los participantes sobre el uso a lo largo de su vida y el uso más recientes (durante 30 días) de cigarrillos electrónicos, cannabis y cigarros tradicionales.

Los síntomas de bronquitis, los más comunes

Para determinar los resultados, los investigadores definieron los síntomas bronquíticos como tos diaria durante 3 meses seguidos o bronquitis en los 12 meses anteriores, o congestión o flema sin estar acompañados de un resfriado.

 

 

La sibilancia se definió como sibilancias o silbidos en el pecho en los 12 meses anteriores. La dificultad para respirar se definió como la que se produce en respuesta a apresurarse en un terreno llano o subir una ligera colina.

En el análisis final, las sibilancias y la dificultad para respirar variaron según la oleada. Pero los síntomas de bronquitis fueron los más comunes. En cada ola el resultado fue: 19,5%, 22,5%, 23,5% y 26%, respectivamente.

El vapeo se asocia a un mayor riesgo de sibilancias, síntomas bronquíticos y dificultad para respirar

El uso de cigarrillos electrónicos durante los últimos 30 días se asoció con un mayor riesgo de sibilancias, síntomas bronquíticos y dificultad para respirar después de ajustarlo para el uso personal y la exposición pasiva al humo de cigarrillos y/o cannabis.

Las probabilidades de tener sibilancias eran un 81% más altas entre los usuarios de cigarrillos electrónicos durante los últimos 30 días que entre los que nunca lo habían usado; de síntomas bronquíticos 2 veces más probable y dificultad para respirar un 78% más probable después de tener en cuenta la ola de encuestas, la edad, el sexo, la raza y la educación de los padres.

 

 

Un ajuste adicional por el uso simultáneo de cigarrillos y cannabis y la exposición de segunda mano a cigarrillos electrónicos, cigarrillos y/o cannabis debilitaron ligeramente todas las asociaciones observadas.

Hacia una regulación del uso del vaper

Alayna Tackett, psicóloga pediátrica e investigadora, tiene claro que este estudio “contribuye a la evidencia emergente” de estudios toxicológicos y en humanos de que vapear está asociado “con un mayor riesgo de desarrollar síntomas respiratorios”. Por ello, esta experta cree necesario regular el uso de cigarrillos electrónicos “para minimizar el impacto en la salud” de estos productos en los adolescentes.

En un comunicado, la autora de este estudio subraya que los vaper han sido asumidos por los adultos como una forma de dejar de fumar tabaco tradicional. Y, aunque pueden ser menos nocivos, aún se sabe poco del impacto a largo plazo de vapear.

“Los cigarrillos electrónicos no están exentos de riesgos, especialmente sin una regulación cuidadosa de los aromas y aditivos químicos que todavía existen en algunos productos actualmente.

Limitar el inicio del uso de cigarrillos electrónicos por parte de no fumadores es un objetivo fundamental de salud pública, especialmente para las generaciones más jóvenes que se vuelven adictas”.

 

 

Los peligros del vapeo

Vapear no solo aumenta el riesgo de bronquitis y otros problemas respiratorios. También tiene otras consecuencias negativas, por ejemplo, tiene efectos nocivos en el desarrollo cerebral de los adolescentes.

“Incluso los líquidos que no tienen nicotina pueden contener sustancias químicas perjudiciales para la salud y cancerígenas. Es de todos conocido que la nicotina es adictiva y que tiene efectos neurotóxicos en los cerebros en crecimiento de niños y adolescentes, pero muchas de las sustancias que contienen estos líquidos, aunque no tengan nicotina en su composición, podrían tener efectos insospechados en los cerebros en crecimiento, ya que no se trata de sustancias pensadas para este uso”, explica la pediatra Gloria Colli.

Antes de este estudio sobre vapear y la bronquitis, ya existían datos en animales que indicaban que los cigarrillos electrónicos “tienen efectos nocivos para el desarrollo y crecimiento de los pulmones. Estos dispositivos además pueden usarse para vaporizar otras sustancias como ceras, aceites, hierbas o marihuana”.

 

 

Hay que tener en cuenta que se están comercializando vapeadores para niños. Y que, incluso si son los adultos los que los utilizan, existe riesgo para los más pequeños. “Las soluciones con nicotina pueden ser tóxicas para un bebé o un niño por ingestión o absorción a través de la piel”, indica nuestra experta.

La intoxicación por nicotina puede producir vómitos, sudoración profusa, mareos, taquicardia, hipertensión, letargia, convulsiones y fallo respiratorio, y menos de media cucharadita de nicotina líquida puede ser mortal para un bebé. 

La Evali y el vapeo

La Evali es la expresión máxima del daño directo de vapear. Se trata de un daño pulmonar potencialmente mortal que puede comenzar a los pocos días o semanas tras usar un producto para vapear.

No se conoce qué lo causa exactamente, pero los expertos apuntan como posible responsable al acetato (aceite) de vitamina E que puede dañar los pulmones. Además, los productos químicos, los vapores y los metales pueden causar un daño pulmonar directo.

 

 

Evali: Síntomas

Por lo general, la Evali se trata en el hospital con medicamentos y oxígeno adicional. Al principio, los síntomas pueden ser parecidos a una gripe. Luego, pueden aparecer otros síntomas como:

• Tos.
• Falta de aliento.
• Dolor en el pecho o abdomen.
• Latidos cardíacos rápidos.
• Respiración rápida.
• Fiebre.
• Escalofríos.
• Náuseas, vómitos, o diarrea.
• Pérdida de peso involuntaria.

Si tu hijo o hija adolescente vapea y tenéis dudas sobre cómo hablarles acerca del tabaco, alcohol u otras drogas, podéis consultar de manera online con nuestro equipo de expertos/as a través de la Tribu CSC. Entre ellos/as, se encuentran la pediatra Gloria Colli y la psicóloga infanto-juvenil Elena Mesonero.