Especial juguetes (II): Qué regalar a peques de 12 a 24 meses

Artículo publicado el 4 Dic 2020 - Este artículo ha sido revisado y actualizado con fecha 16 diciembre, 2023

Los mejores juguetes para niños de 12 a 24 meses son aquellos que acompañan sus grandes hitos evolutivos en este periodo sin sobreestimularles ni frustrarles. 

Juguetes para niños pequeños: de 12 a 24 meses

En un primer post os hablábamos de cuáles eran los juguetes para bebés de 0 a 12 meses más idóneos. Muchos de ellos seguirán siendo válidos en esta segunda etapa, ya que los niños y las niñas sacarán cada vez mayor partido a sus juguetes. Además, en este periodo evolutivo, los y las peques siguen siendo muy sensoriales.

Sin embargo, el movimiento y la exploración cobran cada vez mayor protagonismo. Y es que una de las cosas más fascinantes a estas edades es la de aprender a caminar con soltura y seguridad. El poder desplazarse de forma autónoma, les abre la puerta a todo un mundo de posibilidades que antes no tenían.

 

 

Así, pueden empezar a usar sus manos libres para manipular materiales y objetos cotidianos. En esta etapa, lo cogen todo y les gusta transportar objetos y cambiar de sitio las cosas que les rodean. Así pues arrastrar, empujar, vaciar y llenar, transportar, encajar, apilar…

Todas ellas son actividades que aparecerán cada vez de forma más habitual si les dejamos la suficiente libertad de movimiento y exploración. ¡Y justo son las que sus juguetes tienen que potenciar para favorecer su desarrollo en esta fase!

 

 

Alrededor de los dos años, empiezan a imitarnos (algo que hace mucha gracia a las personas adultas, pero que supone un verdadero aprendizaje para ellos y ellas) mediante el juego simbólico (cocinitas, casitas, médicos, etc.), también llamado juego de roles o de imitación.

Y también son muy ordenados (les encanta clasificar por formas, tamaños, colores…) obedeciendo a la necesidad de estructura que precisan en su mundo, el que están aprendiendo a conocer y precisan comprender, encontrar una lógica y coherencia a su alrededor. De esta forma, comenzamos a observar que apagan luces (esto también es porque están aprendiendo relaciones de causa-efecto), cierran puertas y cajones, ordenan materiales…

 

 

La música y la expresión artística (presentes de forma innata en todos nosotros y nosotras desde que nacemos), también se desarrollan poderosamente en esta etapa. Para aprovechar esa inquietud, es recomendable que vayan apareciendo en sus juegos los primeros instrumentos musicales y materiales para acompañar el movimiento corporal, que continúa siendo su juego principal (además de la imitación que, como ya hemos comentado, es tan característica de esta etapa).

La selección de materiales de juego de este post está pensada para proponer juguetes que acompañen todos esos cambios que están ocurriendo en esta fase. Así, encontraréis materiales que les permitan reforzar el equilibrio y la coordinación, que les permitan imitar el mundo de los adultos con herramientas adaptadas a su medida, materiales de exploración, que fomenten el movimiento, la expresión artística y corporal, que contribuyan a su razonamiento lógico, etc.

 

 

Por supuesto, son vuestros hijos e hijas y nadie los conoce mejor que vosotros y vosotras. Cada niño y cada niña es un mundo. No todos y todas evolucionan igual, de la misma manera o al mismo ritmo. Y, al igual que los adultos, ¡tampoco todos los peques tienen los mismos gustos ni las mismas habilidades! 

Lo mejor para acertar a la hora de elegir un juguete para nuestros hijos e hijas es observar su juego, sus inquietudes, preferencias, cosas favoritas y actividades más repetidas (¡o las que más les cuestan!), porque esa es la mejor forma de encontrar el juego, el material o el juguete perfecto en cada caso, para cada uso y para cada niño o niña.

Apilables y encajables

A partir de los siete u ocho meses este tipo de juguetes se convierten en uno de los favoritos de los y las peques de la casa. Estos círculos de madera de colores apilables y encajables están inspirados en la pedagogía Waldorf, tienen los colores del arcoíris y están elaborados en madera.

 

 

Es un juguete sencillo a la par que versátil porque los y las peques pueden jugar con sus piezas a apilarlas, encajarlas unas dentro de otras, hacerlas rodar… Y también pueden usarlos como cuencos y llenarlos de objetos, de tierra, de agua… ¡Experimentar!

Los niños y niñas de aproximadamente un año desarrollarán cada vez más su motricidad fina y con ella, su capacidad de manipular tamaños diferentes. A medida que se acercan a los dos años, les encanta descubrir cosas nuevas y apilarlas unas encima de otras. ¡Entonces ya podrán formar construcciones más complejas! Es además un juguete fabricado en madera de gran calidad tratada con cera y teñida con tintes naturales.

 

 

El set de cubos de madera de Grimm’s son un material similar, aunque de forma cuadrada y de gran tamaño. Son perfectos para jugar a apilar, guardar tesoros y hacer construcciones. También sirven para que los y las peques ordenen por tamaño o para usar como cajas para guardar sus cositas. Además, se pueden emplear para realizar construcciones de casas de muñecas, puentes, túneles… Están fabricados en madera con un acabado de aceite de vegetal.

 

 

 

Sobre el arcoíris Waldorf hablamos largo y tendido en un post anterior. Se trata de un material de juego desestructurado y manipulativo que fomenta muchísimas habilidades y ofrece infinitas posibilidades de juego a los peques y no tan peques, ya que es uno de los juguetes que les acompañarán durante más años a lo largo de su infancia. Con él podrán crear estructuras simples y complejas, crear minimundos y todo lo que se les antoje. Desarrolla su imaginación, su habilidad motora, su capacidad de razonamiento… ¡y es súper decorativo!

 

 

Las torres de encaje también son fantásticas a partir de los 12 meses. Esta de madera es un apilable con nueve discos de diferentes tamaños y colores (también en tonos pastel), para apilar en el soporte. Incluye piezas grandes y muy manejables por las y los más pequeños. Estos discos son ideales para que los niños desarrollen su habilidad manipulando las diferentes piezas de colores llamativos. Están fabricados en madera de excelente calidad, con colores a base de agua no tóxicos y un acabado de aceite de vegetal.

 

 

Una versión similar, más sofisticada, sería esta base con cuatro torres apilables de madera de diferentes tamaños y colores, para apilar en el soporte. Incluye 14 piezas grandes y manejables. También están fabricados en madera, con colores a base de agua no tóxicos y tienen el mismo acabado de aceite de vegetal.

 

 

Este otro encajable con forma de precioso tren de madera con una locomotora y dos vagones pintados en colores naturales es ideal porque ofrece a los y las peques la posibilidad de jugar a los encajes, a las construcciones y desarrollar el juego simbólico. ¡Es un fantástico 3×1! Si quieren, pueden desmontar los 19 bloques que lo componen convirtiéndolo en un juego de apilar y encajar.

También pueden construir diferentes combinaciones de trenes con todas sus piezas ¡o usar estas para construir lo que ellos y ellas quieran de forma libre! Los vagones se pueden separar, tienen dos o tres palos redondos para introducir las piezas, algunas planas, otras en forma de triángulo. Este juguete está fabricado con madera certificada FSC y pintura no tóxica a base de agua. ¡Es un juguete versátil perfecto para desarrollar la coordinación, la motricidad fina y la imaginación!

 

 

Este juego gigante de apilar y encajar es una estructura de madera maciza, con ocho varillas (cuatro altas y cuatro más bajitas) y un montón de piezas para jugar en ella. Las piezas tienen diferentes formas (cuadrados, flores, círculos, rectángulos…) y con ellas se puede apilar, encajar, montar estructuras, etc. Las piezas, también de madera maciza son de gran tamaño y esquinas redondeadas, están acabadas con aceite de linaza, por lo que tienen un tacto suave.

 

 

Este encajable de clasificación es un juguete de estimulación ideal para que los niños y las niñas aprendan volúmenes de forma divertida. Incluye las figuras geométricas del círculo, el cuadrado y el triángulo, de diferentes tamaños y colores degradados. Permite tres formas de jugar: incrustar, apilar o anidar. 

 

 

La plataforma cuenta con pies de silicona antideslizantes para mayor estabilidad. Este juguete encajable desarrolla la motricidad fina, la construcción visual y espacial, el descubrimiento de las formas y los colores. Está fabricado en madera de haya y contrachapado, y las piezas están pintadas con pintura al agua.

Primeros puzzles

Los primeros puzzles tienen que ser sencillos, de pocas piezas y de gran tamaño. Es mejor que sean de madera resistente y tengan “botones de agarre” para que los y las más peques puedan coger sus piezas con facilidad. Por ejemplo, este puzzle de madera con tres piezas para encajar con forma redonda de varios tamaños y colores es perfecto a partir de los 12 meses. Debajo de cada círculo hay un dibujo de un animal: mono, león y elefante.

 

 

Este otro puzzle de encajables de madera, con piezas para encajar grandes y manejables por las y los más pequeños, incluye cinco piezas con forma de abeja, mariquita, mariposa, serpiente y tortuga.

 

 

Este puzzle de engranajes de madera tiene piezas móviles con forma de flores que, una vez montadas en la posición correcta, giran creando un bonito efecto. Es ideal para que las y los más pequeños comprendan el sistema de engranajes desarrollando el sistema cognitivo y el reconocimiento de los colores. 

 

 

Juego simbólico

Los juegos de figuras y cubiletes de inspiración Waldorf son un juguete evolutivo que se adapta a las necesidades de juego y desarrollo de los niños y niñas. Al ser su diseño neutro (las figuras no tienen rasgos faciales ni características físicas diferenciadas) resultan enormemente versátiles ya que pueden convertirse en todo aquello que los peques imaginen.

En las primeras etapas de juego los niños y niñas pueden desarrollar el juego simbólico con los cubiletes y las figuras. Más tarde el conjunto se convierte en la herramienta perfecta para practicar matemáticas manipulativas con sus piezas.

 

 

También suponen una primera aproximación de los niños más pequeños al reconocimiento de los colores. Son piezas que favorecen el pensamiento creativo y divergente; están inspiradas en modelos clásicos de la pedagogía Waldorf y fomentan horas y horas de juego abierto e imaginativo.

Invitan a la libertad, la creatividad y la imaginación, ya que permiten a los niños crecer y desarrollarse en un mundo libre y con infinitas posibilidades de diversión. Todo esto se consigue gracias a que sus muñecos no tienen género ni expresión.

 

 

Este Arca de Noé de tela es un bolso de tela con diseños diferentes a cada uno de sus dos lados incluye muchas parejas de animalitos en el interior y resulta perfecto para que los más peques de la casa practiquen el juego simbólico y aprendan los nombres de los animales (cinco parejas de animalitos de peluche: hipopótamos, jirafas, leones, cocodrilos y lémures). Tiene un asa de transporte y la puerta que se abre y cierra con velcro, y se puede lavar en la lavadora a 30 ºC.

 

 

Este bonito tren de madera tiene tres vagones, 10 rieles, personajes y árboles. Es un hermoso juguete que desarrolla las habilidades motoras y estimula el rodar, tapar y apilar los carros individuales y figuras de madera.

 

 

Este set de 18 piezas de muñecos en seis colores que degradan en tres rangos tienen forma de palos y pueden ser duendes, criaturas fantásticas, árboles, animales ¡o cualquier otra cosa que el niño o la niña imagine! Los juguetes abiertos dan a los niños y niñas la oportunidad de convertirse en lo que necesiten según el escenario del juego ideado por ellos y ellas.

Se trata de otra variante también inspirada en la pedagogía Waldorf y su juego libre permite a los peques llevar a la práctica la actividad que surge de dentro hacia fuera, expresándose a través del juego y conectándose con su deseo más interno. También permiten a los niños y niñas aprender colores, y sumar y restar de forma manipulativa.

 

 

En la misma línea que los sets anteriores, tenemos también los brotes de madera, 18 piezas de muñecos con forma de brotes, en seis colores que degradan en tres rangos. Todos estos conjuntos son materiales de juego no estructurados y abiertos, por lo que no hay una forma correcta o incorrecta de ser utilizados y, por eso, no hay instrucciones de uso.

Además, se adaptan y acompañan en todas las fases de aprendizaje. Las piezas se transforman en un material simbólico para la creación de historias y la construcción de mini mundos, además de servir para juegos matemáticos, de lenguaje y sensoriales.

 

 

Este set de seis coches de madera es perfecto para jugar a conducir por la ciudad. Está formado por coches de diferentes diseños y colores fabricados en madera de tilo con colores a base de agua no tóxicos y un acabado de aceite de vegetal. Desarrolla las habilidades motoras estimulando el rodar y también la coordinación óculo-manual.

 

 

El conjunto de 18 insectos de madera está formado por mariquitas, babosas y hormigas de colores arcoíris y pastel. Son fuente de inspiración para todos aquellos niños y niñas que viven en la ciudad, acercándoles al entorno natural ya que mientras juegan con las figuras se despierta su curiosidad sobre el mundo animal.

 

Paneles de actividades psicomotrices

Los paneles de actividades son perfectos para fomentar el desarrollo de la psicomotricidad. En concreto, los paneles de madera de la colección Activity Tiles comprenden un conjunto de seis paneles con forma de hexágono que se pueden unir para formar un mosaico para jugar sobre la mesa, en el suelo, o incluso se pueden colgar en la pared para decorar. Con ellos los peques pueden realizar diferentes actividades.

 

 

Juguetes sensoriales

Esta pequeña mariquita de madera con nueve piezas manipulativas ayuda a los niños y niñas a desarrollar el tacto gracias a sus nueve piezas redondas con diferentes texturas (en relieve, grabado en madera, en corcho, en fieltro y en velcro). Además, los peques pueden asociar los colores de las piezas redondas con los puntos de la mariquita ¡y mirarse en su espejo!

 

 

Este conjunto de tres paneles de madera con purpurina favorecen el juego sensorial. Cada uno viene con purpurina de color plateado, dorado y púrpura dentro de un líquido, de forma que al agitarlo hace movimientos que tienen mucha magia.

Todas las piezas son seguras, están realizadas en madera de calidad y tienen unas asas especiales para que sea fácil de sujetar por un niño o una niña. Se trata de un juego para la observación, que genera serenidad y desarrolla las habilidades motoras.

 

Pueden completarse con los paneles de madera de descubrimiento para crear todo un mundo de colores y efectos ópticos. Están pensando para bebés en desarrollo y son un conjunto de seis piezas de juego sensorial: un espejo plano, una lupa de tres aumentos, tres paneles acrílicos translúcidos (rojo, azul y amarillo) y un espejo doble cóncavo/convexo.

 

Estos coches de madera ecológica con agua en su interior tienen un diseño original de medio círculo y un compartimento medio lleno de líquido de color. Se puede escoger entre el color amarillo, verde o azul ¡o crear nuevos colores si los superponemos! Sus colores llaman mucho la atención de los más peques.

Además, mover el coche es muy sencillo ya que su diseño favorece el fácil agarre, y cuando ruedan observamos cómo se mueve el agua en su interior. Se han elaborado con materiales sostenibles, con tintes vegetales no tóxicos a base de soja y agua, y son resistentes y duraderos.

 

 

Estas cajas de experimentación son un conjunto de tres cajas con diferentes propuestas para que los niños y niñas más peques experimenten con sus pequeñas manos: una caja con puerta, otra con espejo y otra con agujero.

Cada caja es un pequeño mundo para descubrir con retos y propuestas diferentes. Jugar con la permanencia de objetos, los reflejos o los sistemas de cierre. Tres cajas de experimentación para acercar el mundo a los más pequeños.

Aunque es un juego de cajas aparentemente sencillo, tiene un gran potencial en manos de nuestros y nuestras peques. Desarrollan la coordinación óculo-manual, la psicomotricidad fina, la imaginación, el pensamiento lógico…

 

 

¡Las formas sensoriales blandas son un acierto seguro para los y las más peques de la casa! Se trata de 12 piezas de diferentes formas y tamaños (cuadrados, triángulos, círculos…), todas ellas rellenas de un gel blando de diferentes colores y con un toque de purpurina. ¡Perfectas para el juego sensorial!

Con estas piezas blandas los pequeños podrán aprender diferentes formas geométricas mientras las manipulan. Pueden exprimirlas, doblarlas, presionarlas, manipularlas en la caja de luz, jugar a emparejarlas… Tienen una buena medida para las manos pequeñas y son muy versátiles.

 

 

Estos bloques sonoros traslúcidos albergan cada uno de ellos una sorpresa en su interior… Hay tres formas diferentes (rectangular, cuadrado y redondo) y seis colores distintos. Además cada uno tiene un sonido diferente, ya que tienen bolitas de distinto tipo y número en su interior. ¡Y no solo eso! Vienen acompañados de un marco de madera robusta con tapa para guardarlos dentro o hacer de compañero de juego encajando las piezas en su interior como si fuera un puzzle.

Los peques pueden jugar con los sonidos que emiten, con la luz cuando los atraviesa, a meterlos dentro del marco y a sacarlos, a hacer construcciones, a clasificarlos por formas… Su madera es muy robusta, así como las tapas de metacrilato. ¡Y son garantía de horas y horas de juegos variados!

 

Los círculos sensoriales para pies y manos son cinco parejas de círculos con cinco texturas distintas y dos círculos de cada una (uno grande y uno pequeño, uno para los pies y otro para las manos). Se pueden colocar los círculos sensoriales grandes (de 25 cm de diámetro) en el suelo y formar un camino sensorial. Este puede ser transitado con los ojos tapados en primer lugar, para luego repetirlo con los ojos destapados.

Una vez conocidas las texturas con los pies, ¿jugamos a las adivinanzas? Podemos poner los círculos pequeños (de 8 cm de diámetro) en la bolsa de fieltro, e intentar emparejar la textura que estamos sintiendo con los pies con su correspondiente pareja.

Los círculos se emparejan por textura y también por colores. Al ser translúcidos se convierten también en un excelente material para la mesa de luz. Están hechos con silicona súper suave al tacto y son flexibles y resistentes. Además se adhieren perfectamente al suelo, con lo que se evitan resbalones. ¡Y se pueden lavar a mano o en el lavavajillas!

 

 

Los espejos de colores hacen que los peques se vean reflejados en un arcoíris. Se trata de un conjunto de seis espejos fabricados con material acrílico de color amarillo, rojo, azul, verde, plata y morado. Vienen con tres tiras de adhesivo de doble cara para pegar en la pared.

Este set es ideal para desarrollar el juego sensorial. Los espejos son ligeros y flexibles. Se pueden pegar a la pared o disponer encima de una mesa o del suelo. ¡También sirven para jugar con los reflejos del sol entrando por la ventana! Por supuesto, son totalmente seguros para el uso y manejo infantil, y reflejan las imágenes tan bien como un espejo tradicional.

 

 

Esta bandeja con espejo está pensada para niños y niñas de cualquier edad. El espejo, acrílico y de seguridad, es de 20 x 30 cm. y el marco que protege y delimita el área de manipulación es de Goma-Eva imitando a la madera. Podemos usarla como bandeja de exploración individual (el marco nos ayuda a contener cualquier elemento dentro), colgarla de la pared, sacarla al exterior, jugar con los reflejos y la simetría… Es un material muy resistente y doblemente seguro (ya que es acrílico y encima tiene un marco de protección). Además, permite un montón de juegos diferentes.

 

 

El conjunto de seis pelotas táctiles grandes con surcos, cráteres, hendiduras finas y  hendiduras gruesas es de lo más interesantes a la hora de jugar. Están hechas de plástico no tóxico y sirven para ser examinadas, jugar con ellas y descubrir sus diferencias.

Todas son de distintos colores y diferentes texturas en la superficie. Tienen una válvula que deja ir el aire si se aprietan y luego se vuelven a hinchar solas. Se trata de unas pelotas diferentes y que dan mucho más juego que las lisas porque además cada una bota a su manera.

 

 

Estos 16 bloques de madera sensoriales tienen diferentes formas geométricas y relleno en su interior (granos, bolas y arena de color). Promueven la observación en el sentido más amplio de la palabra, ya que todas las formas iguales tienen el mismo color (así, por ejemplo, independientemente del contenido del bloque, los cuadrados son siempre de color rojo), por lo que constituyen un excelente ejercicio de clasificación.

Las piezas incluyen material acrílico transparente de colores que las hace perfectas para usar junto con las mesas de luz. Son perfectas para que lo niños y niñas desarrollen su habilidad manipulando y jueguen a apilar por formas o colores y construir casas, puentes, murallas… ¡y todo lo que al niño se le ocurra, desarrollando así su imaginación!

 

 

Picafortes

Los picafortes son un juguete “de toda la vida” con el que nuestros hijos e hijas pueden experimentar el juego de golpear las bolas de colores para ver cómo caen produciendo el sonido característico de la madera. El picaforte nave espacial es un juguete de madera con tres bolas con diseño de cara de astronautas. Incluye bolas grandes y muy manejables por los y las más pequeñas.

Basta con golpear las bolas con el mazo para que caigan dentro de la nave espacial. Después, se abren las compuertas para que las bolas puedan salir de la nave espacial. A los peques les sirve para trabajar las habilidades motoras, la coordinación visomanual y la relación causa-efecto (golpeo-cae la bola, abro la puerta-rueda).

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Cubos de actividades

Este cubo de madera con laberinto y actividades con piezas que pasan por las barras metálicas de un extremo a otro del recorrido, ayudará a los niños a desarrollar su concentración y su motricidad fina a la vez que se divierten. Tiene una actividad diferente en cada lado e incluye un clasificador de formas (círculo, flor, cuadrado y triángulo) con tapa que se levanta para sacar del interior las piezas. Además, tiene cuatro piezas giratorias cuadradas que giran sobre un eje central fijo, y cuatro ruedas que se desplazan hacia los lados por un recorrido.

 

 

Este otro cubo encajable de formas geométricas en colores pastel y diferentes figuras con diseño de animales, es un juguete educativo que permite a los niños conocer mejor las formas geométricas básicas y los colores. Con sus piezas los niños y niñas desarrollarán su capacidad para contar, diferenciar entre varias formas y colores y utilizar sus habilidades motoras finas para insertar correctamente las piezas de madera.

Además, aprenderán a diferenciar entre formas y colores reconociendo qué forma pertenece a qué hueco de la caja. De esta forma, los peques se desarrollarán cognitivamente a medida que utilizan la resolución de problemas y el proceso de prueba y error. Y también desarrollarán sus habilidades motoras finas y la coordinación ojo-mano.

 

Mesa de actividades

Esta mesa de actividades de madera tiene múltiples juegos para los más pequeños. Incluye un camino para recorrer por un simpático caracol, un looping o togobán para hacer circular las bolas, apilables con forma de animales, ruedas dentadas con un erizo encima de una de ellas y piezas encajables de formas geométricas que caen en una bolsa de tela. Con ella los niños y niñas aprenderán los colores, las formas geométricas y los nombres de los animales.

 

 

Esta otra divertida mesa de madera con laberinto y múltiples actividades cuenta con una gama con colores delicados y líneas redondeadas, inspirada en las tendencias actuales para acompañar los primeros aprendizajes de los más pequeños de la casa con toda dulzura. Dispone de piezas para apilar, formas para encastrar, engranajes para rodar, un rail de tren circular con tres vehículos y tres loopings con bolitas, molino y campana.

Es perfecta para jugar a nombrar los colores de las formas, clasificar las piezas según su forma, hacer circular los coches por el rail… ¡Los niños y niñas aprenderán los colores, las formas geométricas y las diferentes figuras, a la vez que se divierten!

 

 

Instrumentos musicales

Este maletín con ocho campanas musicales de metal y con estructura de madera es un material inspirado en la pedagogía Montessori que permitirá a las y los pequeñines crear muchas canciones diferentes, simplemente golpeando y presionando con la mano.

Y es que basta con apretar o tocar simplemente los botones de madera para producir sonidos espectaculares, con una o las dos manos al mismo tiempo; de manera que es ideal para promover la sintonización de diferentes patrones rítmicos y sonidos a edades muy tempranas.

Tocar música es un verdadero desafío para el cerebro, porque demanda aptitudes motrices y sensoriales, pero también es emoción, cognición y empatía. Incluye ocho tarjetas con partituras de melodías a doble cara, con un total de 16 canciones, para que el niño las represente siguiendo los colores.

El uso de las notas de color (en lugar de las notas musicales reales) es bastante simple, ¡ideal para las y los más pequeños! Además las ocho campanas se presentan en un práctico maletín de almacenamiento con asa para transportar.

 

 

Otra variante más sencilla es esta base de madera con cinco campanas musicales de metal con diferentes colores y tonos de nota musical. Incluye un librito con varios patrones de melodías por colores, para que el niño o la niña los represente siguiendo los colores.

Con estas cartas de ejemplo que incluye en el librito, puede tocarse una canción. También se pueden descargar más patrones para melodías. Así, las y los más pequeños podrán componer y crear sus propias canciones solos o en compañía de amigos, con la ayuda de las hojas en blanco y pegatinas que incluye.

 

 

Este simpático piano de madera de la gama Baby Einstein, permitirá a las y los pequeñines crear miles de canciones diferentes con un simple y delicado toque de dedos. Su tecnología táctil permite la ausencia de botones y llaves para su uso por los y las más pequeñas.

Además, incluye tres hojas de música especialmente diseñadas para incitar a los peques a practicar su capacidad de relacionar y asociar colores con notas. Es ideal para promover la sintonización de diferentes patrones rítmicos y sonidos a edades muy tempranas, y cuenta con botones para regular el volumen.

 

 

Con este xilófono de madera ovalado podemos hacer despertar en los más peques un interés creciente por la música. Tiene cinco paneles de colores que fomentarán su coordinación ojo-mano y además favorece el desarrollo de las habilidades auditivas en los niños y niñas.

Está fabricado en llamativos colores y madera de caucho ecológica, a través de procesos de fabricación sostenibles y respetuosos con el medio ambiente. Además, el pegamento es no formaldehído y los pigmentos de color son orgánicos y los tintes a base de agua, no tóxicos.

 

 

Este acordeón de madera estimula la percepción espacial en relación a las melodías, los tonos y los sonidos, y favorece el desarrollo de las habilidades auditivas, además de permitir practicar habilidades motoras gracias a su mecanismo. También está fabricado en madera de caucho ecológica.

 

 

Este banjo de madera es un anjolele de tres cuerdas que se pueden ajustar gracias a las tres clavijas giratorias que incluye. Es ideal inspirar la creatividad musical de los peques explorando diferentes sonidos con el rasgueo de sus cuerdas. Favorece el desarrollo de las habilidades auditivas, así como la coordinación. También está fabricado en madera de caucho ecológica a través de procesos de fabricación respetuosos con el medio ambiente.

 

Arrastres

Los arrastres son ideales para favorecer el movimiento y el desarrollo de la motricidad gruesa en los y las peques que ya han dado sus primeros pasos y tienen cierto control sobre su equilibrio. Los hay de muchas formas y diseños diferentes que permiten a los niños y niñas transportar sus juguetes: vagoneta de almacenaje de juguetes, juego de construcción y/o encajes, instrumentos musicales, juegos simbólicos…

 

Primeros juegos de construcción

Hay multitud de bloques de diversas formas, diseños y materiales que son perfectos para que los niños desarrollen la motricidad fina y su habilidad manipulativa. Todos ellos son perfectos para construir casas, castillos, torres, puentes, carreteras, murallas… y favorecen el pensamiento matemático y la creatividad.

 

 

Estos bloques de silicona de colores traslúcidos forman un set de 24 bloques de silicona de colores translúcidos, perfectos para usar con las mesas de luz. Son perfectos para ser colocados, ordenados o apilados en una fila o una columna proporcionando a los peques su primera experiencia de construcción con ladrillos.

Además, gracias a su material translúcido dejan traspasar la luz por lo que se pueden usar para jugar con juegos de luz y a superponer colores. Están fabricados en silicona de excelente calidad, suave y flexible al tacto, que permite que sean fáciles de manejar por los más pequeños y que también se puedan usar sobre la arena, tierra o incluso en el agua. Además, se pueden limpiar fácilmente con agua con jabón ¡o incluso en el lavavajillas!

 

 

Juegos de cerraduras

Las cajas de madera con encajes y cierres son un material manipulativo que desarrolla múltiples capacidades en los más peques. Este conjunto incluye seis cajas de madera y seis piezas geométricas de diferentes colores, para que los niños y niñas practiquen el encaje de piezas y los cierres. También incluye una bandeja de madera para ordenar las cajas.

Es material de la metodología Montessori ideado para trabajar con los niños la habilidad motora y el ingenio con las manos. Se trata de un ejercicio táctil que permite que el niño se centre en introducir las piezas de formas geométricas en su correspondiente compartimento. Después, practicará la acción de abrir y cerrar los compartimentos para sacar las piezas, gracias a las diferentes cerraduras.

Cada puerta es de diferente color y todas tienen cierres de varias formas (candado, pestillos, etc.) Además, las cajas tienen ventanas acrílicas de colores transparentes que permiten ver el interior. El set incluye una práctica bandeja con código de color, con zonas para encajar las cajas en su color correspondiente.

 

 

Aire libre

Y por último, ¡no nos podemos olvidar del juego al aire libre! Este arenero de madera con banco de almacenaje está hecho de madera maciza tratada para exterior. Tiene pequeños asientos en las esquinas y un amplio banco de almacenaje donde guardar los juguetes para jugar con la arena. Un revestimiento interior evita que crezcan las malas hierbas y permite el drenaje de la arena. Incluye también una funda protectora.

Se puede montar en un jardín, patio o terraza y podemos llenarlo con más o menos arena según lo queramos dejar medio o totalmente lleno. En él los peques pueden hacer castillos de arena, carreteras para los coches, jugar con moldes, excavar un agujero…

 

 

Un arenero es un espacio de juego sensorial y motriz sin fin. Permite a las y los pequeños experimentar y desarrollar el juego sensorial y motriz que tanto les gusta y favorece su desarrollo. Su diseño es colorido y está fabricado con madera de pino certificada FSC. Al acabar de jugar, podemos guardar los juguetes en su amplio espacio de almacenaje para que quede todo ordenado, y lo tapamos para proteger la arena.

Si tenéis dudas a la hora de elegir los mejores materiales de juego para vuestros hijos e hijas, en la Tribu CSC podéis consultar a nuestras especialistas en desarrollo infantil. El primer meses es gratis y no hay compromiso de permanencia. Asimismo, podréis compartir dudas y experiencias con juegos y juguetes específicos con el resto de familias miembro.

 

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