Disgrafía y disortografía: Qué son estos dos trastornos de la escritura y cómo trabajarlos en casa

Como en el resto de las dificultades de aprendizaje, el acompañamiento de la familia es esencial

Ya hemos hablado en repetidas ocasiones de la importancia que tiene el aprendizaje de la lectoescritura tanto a nivel de logros académicos como para el posterior desarrollo cognitivo y cultural de niños y adultos. Sin embargo, en algunos niños, este complejo proceso no se da de la forma esperada y aparecen dificultades en su aprendizaje como la disgrafía y la disortografía.

Trastornos de la escritura

El DSM-5 cataloga las dificultades de aprendizaje en varios subtipos: dificultades en lectura, en comprensión lectora, en escritura, en cálculo y en razonamiento matemático. Por tanto, la disgrafía y la disortografía formarían parte de estas dificultades de aprendizaje aunque no aparecen en la clasificación del citado manual con estos términos concretos.

Pero ¿en qué se diferencian estos dos términos que parecen tan similares? La respuesta no es sencilla porque incluso, en ocasiones, se han utilizado como sinónimos o términos relativamente intercambiables. Si tuviéramos que encontrar un punto de diferenciación, este sería la legibilidad de la letra.

 

¿Qué es la Disgrafía y Disortografía?- Ejemplos y Tratamientos

 

Disgrafía y disortografía: ¿Cómo identificar a un niño o niña con disgrafía y/o disortografía?

Así, en la disgrafía, el trazado de la letra aparece alterado, las letras son muy grandes o se dan fluctuaciones de tamaño, aparecen apelotonadas o demasiado separadas, la escritura puede estar inclinada o no respetar los márgenes y el interlineado.

Además, los niños con disgrafía suelen adoptar una postura incorrecta al escribir, la prensión del lápiz es incorrecta y la velocidad de escritura no es adecuada para la edad. Digamos que la disgrafía haría referencia a la parte más motora de la escritura.

Sin embargo, la dificultad en la disortografía radica en la adquisición y asimilación de la normativa ortográfica y de las normas de conversión fonema-grafema haciendo que aparezcan omisiones y adiciones de letras, inversiones (pla por pal), rotaciones (b por d), uniones o fragmentaciones de palabras, etc.

 

¿Qué es la Disgrafía y Disortografía?- Ejemplos y Tratamientos

 

La disortografía suele estar asociada a la dislexia o dificultad de aprendizaje de la lectura, aunque también puede darse como problema específico.

Asimismo, disortografía y disgrafía pueden aparecer de manera conjunta. Pero, ¿cómo podemos saber si nuestro peque tiene un problema de disgrafía o disortografía? 

Lo primero que debemos tener en cuenta es que, aprender a escribir es un proceso en el que es frecuente que los peques cometan errores. Por tanto, no debemos alarmarnos si nuestro hijo escribe algún número o letra al revés o cambia el orden de algunas letras al escribir una palabra. Pero si, estos u otros errores al escribir son frecuentes o no mejoran con la práctica, debemos consultar con un profesional para que realice la valoración oportuna.

Y, ¿cómo podemos ayudarles en casa?

 

 

¿Qué estrategias se pueden trabajar con los niños de la disgrafía y disortografía?

En el caso de la disgrafía, puesto que hace referencia a la parte más ligada a la ejecución motora de la escritura podemos, tanto aportar herramientas compensatorias como realizar actividades que favorezcan los trazos correctos.

Entre las herramientas que puedan mejorar la ejecución encontramos:

  • Elección de lápices de mina blanda, rotuladores, etc. que faciliten la escritura.
  • Selección adecuada de la pauta de papel a utilizar (rayada, cuadriculada, etc.).
  • Ofrecer la posibilidad de un cambio de tipo de grafía (pasar de la grafía ligada a la letra de imprenta a veces da grandes resultados).
  • En niños más mayores y resistentes a la intervención, utilización de teclado.
  • Mobiliario adecuado que favorezca una correcta postura.

Para el ajuste de estos aspectos, es importante preguntar al propio niño sobre los materiales con los que se siente más cómodo.

 

¿Qué es la Disgrafía y Disortografía?- Ejemplos y Tratamientos

 

Algunas de las actividades que podemos realizar con ellos para mejorar la grafía son:

  • Actividades para mejorar la motricidad fina como rasgar o recortar papeles, moldear plastilina o arcilla o incluso amasar son tareas sencillas, pero muy recomendables.
  • Actividades de grafismo como punteados, trazos con diferente direccionalidad, coloreado, etc.
  • Actividades de creación de letras desde una perspectiva multisensorial como escribir en el aire, en bandejas de arena, modelar letras con plastilina, etc.

Para mejorar los errores de la disortografía es importante que lea puesto que estar expuesto a la palabra escrita hace que se escriba mejor.

 

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Además, podemos hacer actividades como:

  • Separar palabras en sílabas y sílabas en letras, buscar rimas, jugar a palabras encadenadas, deletrear o cualquier otro juego que estimule la conciencia fonológica.
  • Escribir palabras al dictado: es importante que el niño sepa para qué lo hace y además es recomendable que tenga un objetivo como, por ejemplo, escribir la lista de la compra. Así, aprenderá que la escritura es útil.
  • Ordenar palabras desordenadas, identificar una letra concreta o buscar una palabra dentro de un texto para después escribirla.
  • Hacer actividades de composición escrita: pequeñas descripciones, cuentos o recetas.

Algunos manuales proponen actividades como seleccionar entre una pareja de palabras en las que aparece una palabra escrita correctamente y otra con errores, aquella que está bien escrita. Sin embargo, los últimos estudios sugieren que esta técnica puede confundir a los niños con dificultades de escritura puesto que seleccionan por azar y además quedan expuestos a palabras escritas de manera errónea.

 

¿Qué es la Disgrafía y Disortografía?- Ejemplos y Tratamientos

 

En resumen, cuando nuestros peques comienzan a escribir se ven inmersos en un proceso que requiere tiempo y esfuerzo. Si aparecen dificultades, es habitual que se cansen y rechacen las actividades de escritura por lo que debemos consultar con un profesional para que pueda realizar la valoración y establecer un programa de trabajo que incluya pautas para casa. En la Tribu CSC puedes consultarnos online cualquier problema que tu peque tenga en el desarrollo del lenguaje o la lectoescritura.

Como en el resto de las dificultades de aprendizaje, el acompañamiento de la familia es esencial: presentar actividades de escritura creativas y basadas en el juego pueden ayudar a mejorar la escritura haciendo que los peques mejoren su nivel de autoeficacia en la tarea y descienda el nivel de frustración y fatiga que les supone realizarlas.

 

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