Hipospadias en el recién nacido

El hipospadias es una patología urológica congénita que afecta a 3 de cada 1.000 niños

El hipospadias es una malformación urológica congénita que afecta a los recién nacidos y que se produce por una fusión anómala de los pliegues de la uretra.

Esto provoca que el orificio uretral (por donde sale la orina al exterior) no se encuentre en la punta del pene, sino en algún punto entre el periné y el pene. Se trata de una patología que requiere una intervención quirúrgica.

En este post os explicamos en qué consiste esta patología, sus tipos y tratamientos, pero si necesitáis información más específica, en la Tribu CSC contáis con el asesoramiento de nuestro equipo de profesionales, a los que podéis consultar durante todo un mes gratis.

El hipospadias en el bebé

Según la Asociación Española de Urología, el hipospadias es la anomalía congénita más frecuente del pene. Aunque la incidencia es variable, en Europa occidental afecta aproximadamente a tres recién nacidos de cada 1.000.

 

10 Cosas que debes saber si vas a visitar a un bebé recién nacido

 

Se manifiesta de diferentes formas. Además del orificio de la uretra desubicado, el prepucio del bebé presenta un defecto en forma de exceso de piel, el pene se curva y puede producirse anomalías en la disposición del escroto. No todas las señales se dan a la vez por lo que en algunos casos no se detecta hasta que se retrae el prepucio (sobre los cuatro a seis años).

Se considera una anomalía aislada de causa desconocida, pero la Asociación Española de Urología señala varios factores que influyen:

  • Entre el 5 y el 25% de los casos se produce en bebés con antecedentes familiares.
  • Se relaciona con la producción de hormonas fetales.
  • Relacionada con otros síndromes genéticos (hay más de un centenar de patologías genéticas que incluyen esta malformación entre sus manifestaciones).
  • Anomalías de la diferenciación sexual.
  • Otros factores (edad avanzada y tabaquismo en la madre, anomalías testiculares y de fertilidad en el padre, crecimiento intrauterino retardado o bajo peso al nacer).

 

Prepárate para las pruebas y analíticas que se realizan durante el embarazo con el Seminario Online “Las pruebas médicas en el embarazo”

 

Detección y tipos de hipospadias

Existen distintos momentos en los que se puede detectar el hipospadias. Por un lado, y gracias al desarrollo del ultrasonido fetal, es posible su detección prenatal, pero en los casos más graves. Gracias a ello se pueden realizar estudios genéticos y descartar otras anomalías asociadas. Una vez que nace el bebé, se puede detectar en el examen físico que se realiza tras el parto.

Sin embargo, esto no siempre es así. Dependiendo del tipo, puede pasar desapercibido en los casos leves. La complejidad del hipospadias depende de lo alejado que esté el meato urinario (apertura) del glande. El aspecto del pene y las dificultades a la hora de orinar son otras señales que permiten detectar esta anomalía congénita.

 

Hipospadias: Tipos y Tratamientos

 

Los tipos de hipospadias dependen de la posición del orificio de la uretra. La Asociación de Urología los clasifica en tres grandes grupos:

  • Hipospadias distales. El orificio uretral está en el glande (60-65% de los casos). Si aquel está cerca de la punta del pene y no tiene mucha incurvación se considera leve.
  • Medios. El meato está localizado en la parte media o proximal del pene (20-30%). El nivel de curvatura es más apreciable.
  • Proximales. La salida de la orina se localiza en la unión del pene con el escroto, el escroto o el periné (10-15%). En estos niños siempre hay una incurvación anómala del pene.

¿Qué tratamiento necesita un bebé con esta malformación?

Una vez que se detecta el hipospadias, es necesario acudir a la consulta de urología infantil. En algunas formas leves no es necesario realizar tratamiento e incluso hay padres que prefieren posponer la intervención quirúrgica (en caso de ser necesaria) a que el menor sea adulto.

El tratamiento consiste en una intervención quirúrgica (que requerirá la hospitalización del niño) para corregir las anomalías del pene. De  este modo, se reconstruye la uretra del niño para que el meato u orificio esté en la punta del pene y permita al niño orinar adecuadamente. También se corrige la incurvación del pene para que este sea recto en la erección. Y, por último, mejora la apariencia estética del pene.

 

 

Los urólogos sí advierten de que el bebé no ha de ser circuncidado en estos casos ya que  la piel del prepucio puede ser necesaria para corregir el hipospadias. El pene del bebé es delicado. Por eso, se tenga o no esta patología o en casos de fimosis, es mejor no tocar y dejar a los especialistas que atiendan y traten a nuestros hijos siempre que sea necesario.

¿Cómo es la cirugía en los casos de hipospadias?

La cirugía para corregir el hipospadias puede ser en un tiempo o en dos. La operación en el primer caso dura entre una y tres horas y se aplica en los casos leves.

La cirugía en dos tiempos se aplica en los casos más graves, en los que se corrige la curvatura del pene y se utiliza el prepucio (injerto) para crear la uretra en la segunda intervención. En la segunda operación, el cirujano hace la uretra usando el injerto. La duración aproximada es de entre dos y cuatro horas.

Tanto si necesita una sola intervención como si se hace en dos tiempos, el niño sale sondado y con un vendaje.

La Asociación Española de Urología subraya que el tratamiento es complejo y que pueden aparecer ciertas complicaciones. Tras ser dado de alta, el menor necesitará cuidados en casa y el uso de medicamentos bajo prescripción médica para su recuperación.

 

9 noviembre, 2023

0 comentarios en "Hipospadias en el recién nacido"

Deja un mensaje

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

 

Síguenos en las Redes

Visit Us On FacebookVisit Us On InstagramVisit Us On TwitterVisit Us On Youtube