Mi bebé no quiere que lo coja en brazos, ¿por qué?

Si a tu bebé no le gusta estar en brazos, hay otras formas de establecer el vínculo sin estresarle

Cuando tienes un bebé o incluso antes de tenerlo, es posible que recibas mensajes poco respetuosos del tipo “no lo cojas tanto que se acostumbra”. Pero quizá te hayas informado y estés decidida a tener en brazos a tu bebé el tiempo que necesite, a portearlo y a escuchar sus necesidades. Pero, ¿qué ocurre cuando un bebé no quiere brazos?

A mi bebé no le gusta estar en brazos, ¿qué hago?

Uno de los sentidos más desarrollados cuando nacemos es el tacto. Esto hace que se convierta en una de las vías de comunicación a la hora de establecer el vínculo con el bebé.

Sabemos que los abrazos cubren una parte de nuestras necesidades afectivas y nos proporcionan seguridad y protección, disminuyen el estrés y hacen que segreguemos oxitocina (hormona relacionada con el placer) y liberemos dopamina y serotonina (hormonas relacionadas con el buen humor). Es lógico pensar que tener al bebé en brazos tenga los mismos efectos. Por eso, la mayoría de los bebés se calman cuando se les coge en brazos.

Sin embargo, a menudo obviamos una cuestión imprescindible: los abrazos producen estos efectos beneficiosos siempre y cuando el que lo recibe lo quiera. Pueden no gustarte los abrazos o solo gustarte cuando te los da una persona en concreto o solo apetecerte en algunas ocasiones. Y no pasa nada. Pues a algunos bebés, les pasa lo mismo.

 

¿Qué pasa cuando un bebé no quiere brazos?

 

Pero como lo habitual es que a los bebés les guste estar en brazos, te produce desconcierto si tu bebé muestra señales de que no le gusta que le cojan en brazos (se pone tenso, llora, se revuelve). ¿Qué es lo que está ocurriendo?

¿Por qué mi bebé no quiere que le coja en brazos?

Lo primero que debemos hacer es descartar que le ocurra algo como tener hambre, el pañal sucio o que le duela algo o tenga fiebre. Una vez que hemos descartado esto, vamos a pensar en las posibles causas.

Si hace mucho calor o va muy abrigado, puede que le resulte incómodo estar pegado a otra fuente de calor como es tu propio cuerpo. Si es así, quizá con quitar algo de ropa se pueda solucionar el problema. También puede ocurrir que le guste tener espacio para moverse.

Si el bebé ha comenzado a girar la cabeza hacia los estímulos visuales y sonoros, es posible que prefiera estar en la cuna o en una mantita en el suelo observando todo aquello que le rodea. Y, si ha comenzado a gatear o incluso esté dando los primeros pasos, puede que le parezca más interesante explorar aquí y allá.

Sin embargo, si a tu bebé parece no gustarle estar en brazos, te preocupa que no establezca un vínculo seguro.

 

Crea un vínculo fuerte y sano con tu bebé que favorezca su desarrollo y vuestra unión con el Seminario Online “El desarrollo del vínculo afectivo”

 

¿Qué podemos hacer en estos casos?

Lo primero va a ser revisar cómo le cogemos en brazos. Es importante que observemos nuestra forma de hacer. Quizá le cojamos demasiado deprisa o bruscamente o no hayamos encontrado el equilibrio entre sostener con firmeza pero suavemente y por miedo a que se caiga le apretamos demasiado. Puede también que la postura no le resulte cómoda o que nos estemos excediendo en pasarle de brazos a brazos porque toda la familia quiere tenerlo un rato.

Una vez que hemos corregido estos pequeños detalles puede que a nuestro peque siga sin gustarle estar en brazos. En ese caso, seguiremos observando. ¿No le gusta en ninguna ocasión? Puede que sí haya momentos en los que nuestro bebé esté calmado y encantado en nuestros brazos. Si es así, observa en qué momentos ocurre (mientras come o después de comer, cuando tiene sueño, etc.) y aprovecha esos ratitos.

Si no es así, buscaremos otras formas de establecer el vínculo. ¿Cómo? Utilizando otros canales de entrada. Si el bebé está tranquilo en su mantita, puedes sentarte o tumbarte a su lado, cogerle la mano, acariciarle la cara. Así, podrás cubrir esa necesidad de afecto sin estresarle.

 

¿Qué pasa cuando un bebé no quiere brazos?

 

Otra de las formas más eficaces para vincularse con un bebé es hablándole. A veces nos olvidamos de hablar a nuestros bebés porque ellos no hablan, pero sabemos que esos primeros contactos comunicativos favorecen el posterior desarrollo del lenguaje.

Utiliza un tono agradable, volumen bajo y modula tu voz para que tu bebé localice la fuente del sonido y te mire. El contacto visual es igual de importante que el contacto físico.

Seguramente ya estés pensando que cantar también es una buena opción. Por supuesto. La música forma parte de nuestra esencia como seres humanos. No en vano, en todas las culturas del mundo las madres cantan nanas a sus hijos. En este punto es importante recordar que nuestros/as hijos/as no necesitan que tengamos grandes voces o que afinemos a la perfección. Nuestros bebés solo necesitan que mamá o papá les canten. Nada más.

Así que, si tu bebé no es muy aficionado a estar en brazos, no te preocupes. Solo busca otras formas de comunicarte con él. Jugar frente a frente, mirándoos a la cara, acariciarle mientras está en la cuna, cogerle de la mano cuando llora, decirle cuánto le quieres, contarle un cuento o cantar una nana a la hora de dormir son maneras estupendas de crear un vínculo seguro con ellos sin necesidad de estar en brazos.

Si quieres más información o necesitas asesoramiento profesional, estaré encantada de atenderte en la Tribu CSC, donde además puedes consultar al resto de miembros de nuestro equipo de expertos en salud materno-infantil y crianza respetuosa. 

 

Autor/a

¿Te interesa todo lo relacionado con Crianza Respetuosa?

Te regalamos UNA SEMANA GRATIS de TRIBU CSC.

El lugar donde podrás descubrir todo lo que necesitas saber sobre Crianza Respetuosa y muchos otros temas que te ayudarán en la crianza de tu hijo/a.

Únete ahora a la Tribu CSC, podrás disfrutar de mas de 120 cursos para padres y madres, 16 profesionales que resuelven tus dudas las 24h y muchísimo contenido exclusivo.

Todo un mes GRATIS. ¡SIN PERMANENCIA!

Responsable: CRIAR CON SENTIDO COMÚN S.L. NIF B67460709, Carretera Rellinars 56 de Terrassa (08225) Barcelona. [email protected]. Finalidad: Gestión de la relación con los clientes y el alta del usuario al boletín de noticias. Legitimación: Consentimiento del interesado. Destinatarios: The Rocket Science Group LLC d / b / a Mailchimp, para la gestion del mailing en el newsletter. Derechos: Acceder, rectificar y suprimir los datos, así́ como otros derechos, como se explica en la información adicional. Información adicional: Puede consultar la información adicional y detallada sobre Protección de Datos en nuestra web https://www.criarconsentidocomun.com/politica-de-privacidad/

0 comentarios en "Mi bebé no quiere que lo coja en brazos, ¿por qué?"

Deja un mensaje

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

ÚNETE A LA TRIBU CSC
(1 semana de prueba gratis)
 

Síguenos en las Redes

Visit Us On FacebookVisit Us On InstagramVisit Us On TwitterVisit Us On Youtube