Parkour, deporte de moda entre niños y adolescentes: ¿Qué debemos tener en cuenta si nuestros hijos lo practican?

Artículo publicado el 17 May 2023 - Este artículo ha sido revisado y actualizado con fecha 3 junio, 2023

El primer sábado de junio se celebra el Día Mundial del Parkour, un deporte practicado en diversas partes del mundo. El parkour se caracteriza por utilizar las calles como escenario para desplazarse de un punto a otro superando todo tipo de dificultades y obstáculos urbanos. En España está cada vez más de moda entre niños y adolescentes e incluso se imparten clases en centros lúdicos y deportivos. ¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de practicarlo? ¿Es seguro para nuestros hijos? ¿Cuáles son sus ventajas y beneficios?

Y es que, aunque se ha extendido la creencia de que el parkour es sinónimo de realizar actividades peligrosas, como saltar de un tejado a otra, o hacer complicadas acrobacias como bajar una acera dando un salto mortal, en realidad las llamativas acrobacias de los expertos esclipsan un deporte muy completo y beneficioso, que consiste en el desplazamiento por cualquier medio motriz (corriendo, saltando, trepando o reptando) por la ciudad.

Es, de hecho, una disciplina física practicada en diversas partes del mundo, que se caracteriza por la fluidez y destreza de movimientos, las soluciones creativas, la autonomía personal, la descarga de adrenalina, la energía, la libertad y la pasión por un deporte que fomenta la creatividad, la confianza y la sana convivencia.

Pero, ¿en qué consiste este deporte? ¿Cuándo empezó el parkour? El parkour se desarrolló en Francia, inicialmente por Raymond Belle y posteriormente por su hijo David Belle y su grupo de amigos, los autodenominados “Yamakasi”, a finales de los años 1980.

¿Qué significa la palabra parkour? “Parcour” es una palabra francesa que significa recorrido y en los “parcours de combattant”, los recorridos de obstáculos para el entrenamiento militar, está la cuna de la disciplina del mismo nombre pero con K: el Parkour, consistente en ir de un lugar a otro superando las dificultades del trazado para encontrar la manera más rápida y fluida de hacerlo.

Parkour, la calle como gimnasio

“La calle es mi gimnasio” es una de las frases que más se asocian al parkour, y es que precisamente en ese entorno, urbano o natural, es donde tiene lugar su ejercicio. El objetivo que se persigue es que el “trazador” utilice cualquier habilidad motriz para desplazarse de la manera más rápida, segura y eficiente posible por el medio urbano.

¿Cómo se llaman los practicantes del parkour? La persona que practica parkour se denomina “traceur” si es hombre o “traceuse” si es mujer, términos ambos derivados del verbo francés “tracer”.

En el parkour se va subiendo el nivel cuando se domina un determinado “escenario” y los recorridos se tornan cada vez más complejos, además de que los movimientos pasan a ser más variados y espectaculares.

¿Cuál es la diferencia entre parkour y freerunning? Aunque a mennudo se confunden ambas disciplinas, el parkour hace hincapié en la eficiencia, mientras que el freerunning, encarna la libertad de movimiento e incluye muchas maniobras acrobáticas. Aunque los dos son a menudo un aspecto similar, la mentalidad de cada uno son muy diferentes.

 

Los movimientos más habituales en parkour se pueden clasificar en 4 grandes grupos:

• Desplazamientos:
  • Pasavallas: apoyando una o ambas manos en un obstáculo, hay que evitarlo con un salto rápido.
  • Ladrón: Si una vez que pasas la valla con las piernas apoyas la segunda mano, se convierte en el movimiento conocido como “ladrón”.
  • Gato: se salta apoyando las dos manos en el obstáculo y pasando las piernas entre ellas.
  • Rompemuñecas: es como el gato, pero pasando primero las piernas estiradas y luego apoyando las manos.
  • Reverso: se pasa por encima del obstáculo dando un giro en el que el cuerpo acaba mirando en la dirección opuesta a la que se empezó. Se puede hacer con una o dos manos.
• Saltos:
  • De precisión: sin carrerilla, con uno o ambos pies, se salta a un punto que sea estrecho, como desde lo alto de un muro a otro.
  • Distensión: si los puntos de desplazamiento anteriores están a diferentes alturas, se llama “distensión”.
  • Salto de brazo: tras el salto se coge la parte alta de un obstáculo. Es el movimiento más habitual antes de trepar.
  • Salto de fondo: desplazarse hacia abajo a una amplia superficie. Si la altura o la longitud saltada es considerable, es adecuado utilizar una rotación para aterrizar.
• Aterrizajes o recepciones (en el parkour se trabajan mucho las caídas para evitar lesiones a consecuencia de los impactos). Las más habituales son:

• • Recepción básica: para evitar que los talones golpeen el suelo y se tenga más amortiguación, se reparte el peso del impacto por el cuerpo, manteniendo las rodillas parcialmente flexionadas y la espalda inclinada hacia delante.
  • Rotación: similar a la anterior, pero se tiene que voltear el cuerpo utilizando como punto de apoyo el omoplato. Se utiliza cuando la velocidad o la altura del salto hacen imposible la básica.
  • Recepciones con los brazos: después del salto del brazo hay que utilizar las piernas para que sirvan de freno y evitar el impacto contra el obstáculo. Además, estando flexionadas ayudarán a iniciar la escalada. Si se salta utilizando una “rama” (algo a lo que agarrarse por encima de la cabeza) se deja que el cuerpo se balancee.
• Otros movimientos:
  • Grimpeo: escalada de terraplenes, muros, o árboles.
  • Tictac: se saltan obstáculos utilizando elementos del propio entorno. Por ejemplo, con la ayuda de un banco del parque se puede saltar una valla.
  • 180: dar un giro de 180 grados apoyándose en un objeto, acabando colgado y sujeto por las manos. El hecho de descolgarse se llama “liberado”, y existe la variante en la cual en la caída se hace otro giro para situarse de cara al recorrido y ganar tiempo.
  • Laché: estando colgado de una “rama”, pasar a otra.

 

¿Cuál es la filosofia del parkour? ¿Es un deporte peligroso o una actividad vandálica?

Esta práctica física busca ser un reto para el cuerpo, y también para la mente: se trata de sortear obstáculos, no importa lo difíciles que sean, gracias a la estrategia y las habilidades propias de cada persona que entrena cada día para ser mejor en lo que hace.

Para saldar el debate sobre si se trata o no de un deporte peligroso, Ramón Soto-Tautiva, vicepresidente de PAWA, en declaraciones al diario ‘El Mundo’, incide en que un traceur no puede poner en riesgo su vida, estaría incumpliendo su lema: “Ser y Durar”.

Pero, ¿cuál es el principal objetivo del parkour? Según sus propios practicantes, trata de toda una filosofía de vida que tiene por objetivo aprender a afrontar los problemas cotidianos sin huir de ellos. “Te ayuda a superar tus límites físicos y mentales”, explica uno de los apenas 1.000 jóvenes que lo practican en España.

Un buen traceur nunca molesta a la gente o al entorno, nunca pone en peligro su propia vida (es decir, no emprenderá un salto si no está seguro de que lo conseguirá) y nunca compite contra otras personas.

El objetivo del parkour es el movimiento libre y fluido. Una regla en el parkour es no retroceder, pero esto no significa que el traceur tenga que ponerse en peligro, sino ir superándose cada día, y no debe competir ni intentar superar a los otros.

Como no puede haber competiciones, los traceurs optan por reuniones en las que muestran su progreso y técnica. Normalmente se hace un recorrido y cada uno opta por hacerlo de una manera propia. Estas reuniones son llamadas RT, o Reunión de Traceurs. Una RT es un evento que ofrece la posibilidad de aprender a los menos experimentados.

¿Cuántas personas practican parkour en España?

Hoy en día, alrededor de 100.000 traceurs practican este deporte en el mundo. Su meca es Lisses (Francia), ciudad natal de su creador. No obstante, no es un deporte federado, por lo que la única manera de censar a quienes lo practican es a través de su participación en los blogs de la página web de la asociación mundial del parkour: www.pawa.com.

Según Soto-Tautiva, el número exacto no se conoce porque muchos no se conectan, pero “la onda expansiva de este fenómeno es innegable”. Los países líderes en su práctica son: Francia (3.000 traceurs aproximadamente), Inglaterra (2.500), Estados Unidos (2.000), España (unos 1.000), México (1.000) y Colombia (200).

¿Qué es el parkour para niños?

Últimamente, en muchas instalaciones deportivas o lúdicas, se anuncian clases de parkour para niños que les permiten disfrutar de sus múltiples beneficios practicándolo sin peligro.

Y es que aunque inicialmente el parkour fuera una actividad pensada para los adultos, cada vez se encuentra más orientado al público infantil. Tanto es así, que hoy en día ¡hay actividades de parkour incluso para los peques de 3 años! Gateo, carreras, brincos y muchos más movimientos dirigidos por monitores que hacen las delicias de los pequeños de la casa mientras su aparato motriz se entrena y desarrolla.

Si la práctica la realizan niños y niñas un poco más mayores, les permite desarrollar el movimiento natural con acrobacias seguras, se pueden adentrar en lo que se llama la “estética en los desplazamientos”, es decir, realizar acrobacias sencillas.

Si a tu hijo le llama la atención y si quiere probar el parkour para niños, en muchas ciudades se imparten clases en grupo y/o individuales, y algunas también disponen de espacios al aire libre con circuitos para tal fin y, según su edad, puedes animarle a que pruebe a saltar de un lado a otro.

¿Qué tipo de gimnasia es el parkour? El parkour es disciplina física basada en la capacidad motriz del individuo, desarrollado a partir del método natural. Es conveniente explicara los niños previamente que, como en cualquier otra actividad, se ha de tener cuidado y ser precavido, así como dominar bien la técnica de los movimientos más sencillos antes de encarar mayores retos, pero que no debe tener miedo. Evita decir frases negativas como “¡Ten cuidado que te vas a caer!” o “¡Te lo dije!”. Mejor sustitúyelas por algo así como “¡Ánimo!, yo estoy a tu lado, pero tú puedes hacerlo solo/a”.

Si no estás muy seguro/a de saber alentar a tu hijo/a adecuadamente, lo mejor es buscar actividades programadas con monitores en las que dirijan a los niños y niñas. Al fin y al cabo, el parkour para niños consiste en juegos de movimiento que fomentan su desarrollo físico y mental.

Si quieres más información o necesitas asesoramiento profesional sobre cómo acompañar a tus hijos en la práctica de este deporte de forma segura, en la Tribu CSC puedes consultar online a nuestro equipo de expertos/as en salud materno-infantil y crianza respetuosa. Entre ellos/as se encuentra la fisioterapeuta y experta en ejercicio físico Marta Saeta.

Beneficios y ventajas de que los niños hagan parkour

¿Qué tiene de bueno el parkour? ¿Cuáles son los beneficios del parkour? Los beneficios que se obtienen con el parkour para niños son múltiples y variados:

• Se trata de un ejercicio perfecto para liberar el estrés, soltar energía y sentir adrenalina. A los niños y niñas les viene muy bien hacer unos cuantos movimientos y sacar la tensión de cara, por ejemplo, a los exámenes.
• La autosuperación es otra de las ventajas a tener en cuenta. Para los niños y niñas es todo un reto. Se sienten capaces, mayores, satisfechos y contentos de las acrobacias que logran hacer.
• Si se realiza de forma conjunta, y al no existir competiciones, se promueven valores como el compañerismo, el trabajo en equipo y la solidaridad. Si a un amigo no le sale un movimiento concreto, ¡el resto puede ayudarle!
• Mejora el equilibrio, la concentración y el estado físico de quienes lo practican, en este caso, nuestros hijos e hijas.
• También mejora habilidades concretas como la percepción espacial y las capacidades motoras de fuerza y agilidad.
• Fomenta la perseverancia y la constancia, ya que requiere práctica constante.

Y, por último, se promueve el deporte y combate el sedentarismo y la obesidad infantil. Los niños y niñas dejan de lado las nuevas tecnologías para pasar un rato al aire libre haciendo un ejercicio que les gusta, les motiva, les divierte, que es llamativo y que despierta su interés y curiosidad.

¿Cómo hacer parkour desde cero?

El parkour se suele practicar al aire libre, en medio de la ciudad o el medio rural (sin embargo, también existen salas especiales de parkour). En cualquier caso, es un deporte muy exigente en el que nuestros niños y niñas han de iniciarse progresivamente y que requiere fuerza, resistencia, equilibrio y coordinación.

Es muy importante que los niños y niñas no intenten saltar desde una altura si no lo han hecho nunca antes. Antes de dar el salto, es importante dominar el equilibrio y desarrollar fuerza muscular y coordinación. Todo ello se practica mucho previamente caminando y saltando sobre zonas pequeñas, como bordes de paredes.

¿Qué requisitos debo tener para hacer parkour? ¿Qué hacer antes de hacer parkour? El entrenamiento de parkour gira en torno a la progresión y la repetición. Antes de dar el salto, es importante:

• Tener equilibrio.
• Saber realizar tanto carreras de velocidad y de resistencia.
• Dominar el salto.
• Practicar el movimiento cuadrúpedo (moverte sobre las dos manos y los dos pies).
• Aprender a realizar las caídas para evitar lesiones (aprender a aterrizar para poderte levantar de inmediato y sin lesiones).
• Practicar escalada (la regla general es no trepar más alto de lo que puedas saltar para luego poder bajar)
• Desarrollar fuerza muscular y resistencia cardiovascular (para estar un buen rato corriendo y saltando).

¿Qué es lo más importante del parkour? Lo más importante es la fluidez y el control del movimiento. ¿Qué se necesita para poder hacer parkour? Absolutamente nada. Es un deporte que prioriza las propias habilidades corporales y de estrategia de quienes lo practican, para lo cual solo necesitan llevar ropa ligera y cómoda y un buen calzado deportivo. Las características de unas buenas zapatillas de parkour son: comodidad, buen agarre, buena amortiguación, mucha estabilidad, un buen ajuste y una suela robusta de una única pieza.

Entrenamiento básico para iniciar a nuestros hijos en el parkour para niños

Cualquier persona puede practicar parkour, siempre y cuando lo haga paulatinamente y con prudencia. Es decir, es recomendable prepararse antes de empezar a realizar ejercicios más complicados. Cuanto más en forma estén nuestros hijos e hijas a la hora de iniciarse en el parkour, mejor.

En este sentido, nuestra experta, Marta Saeta, resalta que “al tratarse de un deporte muy explosivo es importante que hagan calentamiento articular antes de comenzar con la actividad”.

“Es importante movilizar las articulaciones llegando a un rango amplio de movimiento para no sufrir una lesión. También hay que empezar haciendo un calentamiento muscular, simplemente trotando un poco para que la musculatura se active y disminuya el riesgo de rotura”.

Asimismo, la especialista señala que “se dará mucha importancia a la técnica antes de empezar con ejercicios más complicados” y que, al terminar, también se deben realizar estiramientos.

“Al terminar se realizarán estiramientos analíticos y globales, estáticos y dinámicos para recuperar más rápido y evitar contracturas musculares. Es importante que reserven un rato antes y después de la actividad para esta finalidad si quieren seguir realizándola a lo largo del tiempo, optimizando el entrenamiento y disminuyendo problemas corporales que puedan surgir durante esta actividad física”, incide Saeta.

Los siguientes ejercicios les ayudarán a iniciarse de forma segura (y nosotros podemos practicarlos con ellos):

• Salto explosivo. Con los pies juntos, a unos 50 cm del objeto (sofá, sillón, escalera, etc.), el niño se agacha, pone las manos atrás para darse impulso y salta. Este ejercicio le ayudará a desarrollar fuerza y técnica.
• Estocada. Damos un paso grande hacia adelante y bajamos de manera que la rodilla trasera toque el suelo. En el aire, cambiamos las piernas de posición. Este ejercicio le ayudará a fortalecer los músculos de las piernas y mejorar la velocidad.
• Burpees. En posición de carrera, tiramos los dos pies atrás en un salto, nos ponemos en plancha y luego recogemos los pies de nuevo y nos ponemos de pie de un salto. Este es un gran ejercicio de fuerza y cardio que involucra gran cantidad de músculos.
• Salto de caja. Empezamos en un desnivel bajo y aumentamos de manera gradual la altura. Al saltar sobre obstáculos desarrollamos potencia en las piernas. Si somos principiantes, empezamos con un salto hacia arriba y después bajamos suavemente.
• Sentadilla. Con los pies ligeramente separados, nos agachamos como si quisiéramos sentarnos en una silla, mantniendo la espalda recta. De esta forma, desarrollaremos mecánica y movilidad óptimas en tobillos, caderas y espalda.
• Tic tac. Se trata de “correr” por una pared. Se practica corriendo en diagonal hacia una pared o un obstáculo y, cuando estemos cerca, colocamos el pie más próximo para empujarmos en dirección contraria, apuntando hacia adelante y arriba.
• Bóveda escalonada. Nos acercamos a una pared o a cualquier otro obstáculo a la altura de la cintura. Colocamos una mano sobre ella y subimos con la pierna opuesta. Situamos la otra pierna debajo del cuerpo y sobre el obstáculo y repetimos usando el otro brazo y la otra pierna.

Aunque el parkour es todo un reto, cada persona avanza a su ritmo en función de los obstáculos que vaya siendo capaz de sortear gracias al entrenamiento constante y la forma física.

Una vez que los niños y niñas empiecen a practicar saltos, es importante recordarles que deben dedicar un tiempo a hacer estiramientos. Cuanto más flexibles sean, menos probabilidades de sufrir lesiones tendrán y mejor se desplazarán.