La OMS denuncia a la industria de leche artificial para lactantes por sus técnicas de marketing manipuladoras

La Organización Mundial de la Salud (OMS) y UNICEF acaban de publicar un estudio demoledor que viene a poner de manifiesto las prácticas agresivas de marketing de las empresas fabricantes de leche artificial y cómo dichas prácticas menoscaban la confianza de las madres y las embarazadas en su capacidad para amamantar. 

El marketing agresivo de la leche artificial y su influencia en la lactancia

El estudio Cómo influye la comercialización de la leche de fórmula en nuestras decisiones sobre la alimentación infantil ha recogido datos de más de 8.000 madres que viven en ciudades de ocho países del mundo: Bangladesh, México, Marruecos, China, Nigeria, Sudáfrica y Reino Unido.

Los resultados de la investigación nos pintan un cuadro completo sobre el efecto del marketing en madres y profesionales de la salud y dicho cuadro es realmente preocupante. Los hallazgos más importantes son:

1. El marketing de la leche artificial está muy extendido, personalizado y es muy poderoso

En todos los países estudiados, las empresas de leche artificial utilizan una gran variedad de tácticas para llegar a las madres y embarazadas, ya sea de forma tradicional o mediante el mundo digital. De hecho, las plataformas digitales y redes sociales suponen una nueva y poderosísima forma de llegar a su población objetivo pudiendo refinar y personalizar las estrategias aún más. 

2. Las empresas de leche artificial usan técnicas de marketing manipuladoras que se aprovechan de los miedos, deseos, dificultades y ansiedades de las madres y padres

En muchas ocasiones la industria asegura que sus productos pueden resolver problemas comunes en los bebés, se posicionan como alguien en confiar, casi como un amigo, creando clubes de madres acompañados de líneas telefónicas “de ayuda” que aprovechan para comercializar sus productos. Incluso han aprovechado la pandemia mundial de COVID y sus miedos asociados para intentar mejorar aún más sus ventas. 

3. Las empresas de leche artificial distorsionan los datos científicos y médicos para legitimar sus afirmaciones y eslóganes y aumentar las ventas

A menudo hacen afirmaciones incompletas o incluso falsas tratando de posicionar su producto como lo más parecido o incluso superior a la leche materna a pesar de la abrumadora evidencia científica publicada acerca de la superioridad y las propiedades únicas e inigualables de la leche materna.

4. La industria de leche artificial se dirige sistemáticamente a los profesionales de la salud, cuyas recomendaciones son muy influyentes, con el fin de que promocionen sus productos entre sus pacientes

A través de patrocinios, incentivos, financiación de formación, directamente o través de instituciones como sociedades médicas o los propios centros de trabajo de dichos sanitarios, estas empresas buscan construir una relación de dependencia y a la vez influenciar a dichos profesionales sanitarios para que recomienden sus productos a las familias. 

5. El marketing de la leche artificial menoscaba la confianza de las madres en su capacidad para amamantar a sus bebés

A lo largo y ancho del estudio, las mujeres expresan sus deseos de amamantar, pero a la vez se muestra que la exposición sostenida a las influencias del marketing de la leche artificial se correlaciona con las inquietudes y miedos sobre su capacidad para llevar a cabo dicha lactancia. A menudo sus miedos reflejan fielmente la información mostrada por las empresas de leche de fórmula a través de sus diferentes herramientas de venta y persuasión. 

6. Es necesario y urgente que los gobiernos, agentes sociales y la sociedad en general tome conciencia de la importancia y urgencia de este problema y se tomen medidas drásticas e inmediatas para frenar estas actividades de marketing agresivo por parte de las empresas de fabricación de leche artificial

La comunidad internacional adoptó en 1981 el Código Internacional de comercialización de sucedáneos de leche materna con el fin de regular las estrategias de promoción y publicidad, pero el estudio demuestra que es vulnerado a diario en todo el mundo. En nuestro país, dicho código se ratificó en el Real Decreto 72/1998, de 23 de enero, pero desgraciadamente también en nuestro país se viola diaria y sistemáticamente dicho código y dicho real decreto:

• Con publicidad y acciones de descuentos directos en puntos de venta, como farmacias.
• Con la entrega de muestras gratuitas.
• Con la recomendación por parte del personal sanitario de una marca concreta de leche artificial.
• Con la exposición a través de redes sociales e influencers de la leche de fórmula a las familias.
• Con la creación de clubes y líneas de expertos financiados por las compañías que aprovechan los datos personales de las familias para enviarles publicidad y productos, y exponerles a información científica tergiversada.

Todas estas estrategias se disfrazan de interés por el bienestar del bebé, pero en realidad tienen un único fin: aumentar las ventas del ya de por sí escandaloso volumen de negocio cuyo valor actual se estima en más de 55.000 millones de dólares en todo el mundo.