Creciendo con los pies: ¿Cuál es el mejor zapato para aprender a caminar?

Érase una vez un niño llamado Martín, que comenzó a caminar a los 12 meses. Era un niño muy despierto y risueño, y su mamá y su papá no le ponían zapatos… hasta que un día se hicieron varias preguntas: ¿Cómo podemos ayudar a la adaptación del pie de nuestro peque? ¿Cuándo y cómo debemos calzar a Martín? ¿Con qué tipo zapato?

Estaban llenos de dudas, pero en ese momento apareció como por arte de magia este post, en el que desde Criar con Sentido Común, os vamos a responder a esa primera duda que se nos plantea cuando tenemos un hijo.

Respeta sus pies: Descalzos es mejor

Este primer contacto contigo es para recordarte la importancia de respetar sus pies. Hasta los primeros nueve meses de vida, nuestros pies pasan por varios cambios. Algo importante por lo que no pasaremos de puntillas es que sienten más que nuestras manos, incluso son un importante captor sensorial. Podemos traducir esto en que procesan información, son capaces de comunicarse con el exterior.

A partir del tercer mes nuestro bebé comienza a descubrir cosas, entre ellas su cuerpo, y juega con los pies, esto ayudará a su desarrollo psicomotor.

Entre el séptimo y noveno mes, llevan sus pies a la boca, toca todo lo que hay a su alrededor con sus pies, porque percibe información valiosa a través de ellos. Por eso por favor mami/papi “no me pongas zapato si no camino, pero ayúdame a recibir más estímulos con alfombras multisensoriales, o masajitos suaves”.

En ocasiones nuestros pequeños no dejan que les toquemos los pies, y es precisamente por esto: tienen tanta sensibilidad que debemos tocar sus pies con mucha suavidad, eso ayudará a su desarrollo psicomotor, estableceremos un vínculo de confianza y estimularás los músculos más pequeñitos de su pie.

Cuándo tu hijo o hija comience a dar sus primeros pasos te recomiendo que sea descalzo o bien con calcetín de suelo (el de los puntitos antideslizante en la planta). Así seguiremos ayudando a un buen desarrollo.

¿Qué zapatos son adecuados para bebés?

Si vas a colocarle algún tipo de zapato, porque va a una escuela infantil o bien va a pisar por suelo o terreno más irregular y quieres calzarlo, el zapato debe ser muy flexible.

Hay calzado que es un calcetín con suela: asegúrate de que sea transpirable (lleva agujeritos en la suela y la suela no lleva cola), con apenas suela, sin contenciones laterales, que tenga una puntera ancha para albergar bien todos los dedos y evitar golpes en las uñas, que dejen el movimiento libre del pie del peque, y se ajuste bien al empeine.

Si quieres ponerle un zapato más “casual” debe ser muy flexible, sin contenciones laterales ni contrafuertes, con abrochamiento de velcro (es el más cómodo, pero puede llevar hebillas, o cierre tipo corchete o clip) y suela muy delgada (de 1 a 3 mm).

Menos es más aquí: menos suela, más perciben. También deben ser transpirables (de tela o algodón para el verano y de piel en invierno, evitando siempre los plásticos, ya que suelen “cocer” el pie).

Recuerda… Casi lo más importante en los primeros pasos es no calzar y estimular mediante alfombras con diferentes texturas, y masajitos suaves. En el próximo post hablaremos de tallaje y si tenéis alguna duda, os espero en la Tribu CSC. ¡Felices primeros pasos familia!