El viernes pasado, mientras leía un comunicado sobre la retirada de la ranitidina, una gestante me llamó por teléfono para preguntarme, asustada, por el tema. Desafortunadamente, la noticia había saltado a los medios generando una…
El embarazo es un periodo fisiológico en la vida de la mujer que trae muchos cambios. Uno de ellos se manifiesta en las encías. Muchas son las mujeres que han sufrido gingivitis en el embarazo. La gingivitis es la inflamación de las encías, que se manifiesta con sangrado espontáneo o al cepillado. Afecta, según los últimos estudios, al 38-49% de embarazadas.
Gingivitis en el embarazo
A partir del segundo mes de gestación, las hormonas que controlan el embarazo actúan de muy variadas formas sobre los tejidos que conforman las encías. Lo podemos apreciar al mirarnos en el espejo: las encías están más blandas, el color es más oscuro (cuando están sanas son más firmes, de color rosa coral), el sangrado tras el cepillado o el uso del siempre imprescindible hilo dental es más frecuente.
Todos estos cambios se revierten espontáneamente tras el parto, siempre y cuando antes del embarazo las encías estuvieran sanas. Según el documento de consenso sobre el sangrado de encías en el embarazo entre la SEPA (Sociedad Española de Periodoncia) y la SEGO (Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia), “el embarazo en sí mismo no causa gingivitis, sino que agrava cuadros inflamatorios preexistentes. En mujeres embarazadas con control de placa excelente, la incidencia de gingivitis es prácticamente nula”.
Es decir, si antes de la gestación ya había problemas con las encías (y ojo, porque normalmente estos no cursan con grandes dolores precisamente, y todavía hay mucha gente que cree que el sangrado de las encías es “normal”), dichos problemas se agravarán durante el embarazo y persistirán tras el parto.
¿Qué es la gingivitis gestacional?
La gingivitis es la inflamación de las encías, pero sin llegar a afectar al ligamento periodontal, que es el que une el diente a los alveolos (los huecos que hay en los maxilares y que albergan las raíces de dientes y muelas). El ligamento periodontal es muy importante en la salud bucodental.
Rodea al diente a lo largo y ancho de toda la superficie de la raíz o raíces, uniéndolo al hueso a modo de una malla elástica que amortigua las fuerzas derivadas de la masticación. Es el que da información al cerebro sobre la dureza de un alimento, dónde lo tenemos colocado, con qué fuerza hay que masticarlo, cuándo debemos pasarlo al otro lado de la boca, qué temperatura tiene, etc.
Cuando la gingivitis progresa, el ligamento periodontal se inflama (periodontitis) y termina por desaparecer, y con él desaparece también el hueso de alrededor del diente. A la larga provoca movilidad en los dientes y finalmente su pérdida. La enfermedad periodontal es la mayor causa de pérdida de dientes en los adultos, por encima de la caries.
Por eso la mujer embarazada debe tener especial precaución en no dejar que su gingivitis avance y se transforme en periodontitis. Pero más importante aún es ir al dentista ANTES de quedarse embarazada, acudiendo a revisión una vez al año como mínimo, y constatar que todo está en buenas condiciones de cara a estos nueve meses.
Al igual que la caries, la gingivitis gestacional (“gingivitis gravídica”) es multifactorial, por lo que no se debe a una sola causa. No se explica solo por la revolución hormonal. No se debe solo al acúmulo de biofilm. Cierto es que hay algunos factores importantes que dependen sobre todo de los estrógenos.
El embarazo implica cambios vasculares, celulares, inmunológicos y microbiológicos que interactúan favoreciendo la inflamación gingival. Algunas mujeres tienen en su boca de forma habitual cierto tipo de gérmenes que son especialmente destructivos con las encías, y que crecen mucho más durante el embarazo.
Cómo tratar la gingivitis en el embarazo
Es muy importante el diagnóstico correcto del estado de salud de las encías en la mujer embarazada, tanto por la relevancia en la propia salud de ella como en las consecuencias sobre el desarrollo del embarazo (tema que dejo para otro post). Entonces, ¿qué hacer para el sangrado de encías en el embarazo? No podemos dejar de insistir en acudir al odontólogo en cuanto sea posible tras confirmar el embarazo (en España, en algunas Comunidades Autónomas, lleva haciéndose así hace varios lustros). Si es necesario realizar cualquier tratamiento, se debe hacer.
Puede ser una simple limpieza (o “profilaxis” o “tartrectomía”), que normalmente no requiere anestesia y se realiza con ultrasonidos; o tal vez sea preciso un tratamiento más complejo, “raspado y alisado” o “curetaje”, para el cual es necesario administrar anestesia local. En este último caso, se trata de eliminar el cálculo o sarro adherido a la raíz del diente o muela, así como el tejido gingival inflamado.
Si hay que utilizar anestesia, se utiliza la habitual (lidocaína). No la “especial”. No hay ninguna anestesia “especial” para embarazadas. La que solemos tener como “especial” es la mepivacaína, que utilizamos en pacientes con patología cardiovascular mal controlada, y no contiene adrenalina. La adrenalina permite que el anestésico permanezca en el lugar donde se inyecta y no se disperse rápidamente.
La adrenalina que contiene la anestesia es una cantidad mucho más baja que la que el propio organismo segregaría en caso de hacer el tratamiento sin anestesia (¡no me puedo imaginar hacerlo a pelo!). No debemos olvidar que es más perjudicial para el feto el que la madre tenga una patología oral descontrolada, que el utilizar fármacos de forma controlada para eliminar dicha patología.
Así pues, lo ideal es encarar el embarazo con una boca en perfectas condiciones, y no sería mala idea reaprender a cepillarse bien los dientes con los mismos reveladores de placa que usamos en niños, y hacerse una revisión para poner todo en orden y tener un motivo menos de preocupación estos nueve meses. ¡Si tenéis alguna duda, os espero en la Tribu CSC!
También te puede interesar...
-
Ranitidina: ¿Qué ha pasado con la ranitidina?
-
Día Mundial de la Tiroides: ¿Qué problemas trae la tiroides en el embarazo?
La glándula tiroidea está localizada en el cuello y no por ser pequeña en menos importante. Tiene forma de mariposa y es imprescindible en infinidad de procesos en nuestro cuerpo, que necesitan las hormonas que…
-
Alergia, asma y embarazo
Alergia, asma y embarazo son combinaciones incómodas, pero por muy incómodo que sea ir con el moquillo colgando o lagrimeando mientras te pican los ojos, estos son solo síntomas menores, ya que hay personas que…
Buscar
Nuestros Cursos
Lo más leído
- Beneficios de la lactancia nocturna
- Doctora, tiene un bultito en el pecho: ¿qué puede ser?
- Sanidad alerta sobre el alto contenido en mercurio de cuatro pescados y recomienda no dárselos a los niños hasta los 10 años
- Bebés de alta demanda: ¿cómo saber si tu hijo es uno de ellos?
- Esas madres y esos padres hippies que no saben lo que hacen
- Nuevo «Mi primer Danone» sin azúcares añadidos: por qué no lo recomendamos
Categorías
- Alimentación Complementaria
- Alimentación con fórmula
- Alimentación infantil
- Crianza Respetuosa
- Desarrollo infantil
- Educación Emocional
- Educación infantil
- Educación Sexual
- Embarazo
- Familias con animales
- Fertilidad
- Juego y juguetes
- Lactancia materna
- Literatura infantil
- Manualidades
- Maternidad y paternidad
- Parto
- Pedagogía Montessori
- Planes en Familia
- Porteo Infantil
- Posparto
- Psicología Infantil
- Recién nacido
- Salud de los Progenitores
- Salud infantil
- Segunda infancia y adolescencia
- Seguridad en el coche
- Seguridad Infantil
- Sueño infantil
0 comentarios en "Gingivitis en el embarazo: ¿Qué hacer si me sangran las encías?"