Formar una familia no es una prioridad para los menores de 45 años: prefieren viajar, prosperar profesionalmente o seguir formándose

The Family Watch ha presentado el “XII Barómetro de las Familias en España”, con datos de 2022. Según su análisis, el 62% de los menores de 45 años antepone viajar, prosperar en el trabajo o estudiar, según el “XII Barómetro de las Familias en España” realizado con datos de 2022

La fundación The Family Watch (Instituto Internacional de Estudios sobre la Familia) es un observatorio de análisis de la realidad social de la familia que (desde una perspectiva interdisciplinar, alejada de cualquier cuestión ideológica o política) se dedica, desde 2008, a la elaboración de informes, estudios, investigaciones académicas e iniciativas para mejorar la calidad de la vida familiar.

Nació impulsada por la International Federation for Family Development (IFFD), organismo internacional destinado a la coordinación de iniciativas de Family Enrichment , presente en 69 países, que es miembro con Estatus Consultivo General en el Comité Económico y Social (ECOSOC) de Naciones Unidas.

Formar una familia no es una prioridad para los menores de 45 años

Formar una familia para los españoles menores de 45 años está en la cola de su lista de prioridades, por detrás de viajar, prosperar profesionalmente y seguir formándose. Algo que tiene mucho sentido si tenemos en cuenta que, a la luz de los datos obtenidos, la gran mayoría considera que lo tiene mucho más difícil a la hora de criar hijos en comparación con las generaciones anteriores, al deterioro de la salud mental y al aumento de la incertidumbre.

Son los datos reflejados en el “XII Barómetro de las Familias en España”, encargado por The Family Watch a la empresa de investigación GAD3, que encuestó a un total de 1.002 hogares a lo largo de 2022.

“Tras estos años de pandemia y declive económico, las familias españolas comienzan a sentir su impacto, desde el punto de vista psicológico, en la incertidumbre e inestabilidad”, señala el documento.

La incertidumbre que comenzó con la pandemia, el deterioro de la salud mental (provocado en gran parte por el confinamiento) y el impacto de la crisis económica derivada de la crisis por coronavirus y la guerra en Ucrania, han disminuido las expectativas de futuro de la ciudadanía española, especialmente las de los jóvenes: más del 80% considera que ahora existen más dificultades para formar una familia que en generaciones anteriores, incluso aunque ha crecido la percepción de que es algo que está bien valorado social y laboralmente (el 57% así lo defendió en 2022, frente al 51% del año anterior).

Quieren tener hijos, pero no en un plazo de 5 años

La prioridad para los jóvenes españoles es siendo viajar y conocer diferentes culturas (73%), seguida de prosperar profesionalmente (65%) y ampliar los estudios (50%). Así, la decisión de formar una familia queda en último lugar (62%). Aun así, ha aumentado el porcentaje de jóvenes que tienen el deseo de tener hijos (solo el 26% lo deseaba durante la pandemia, en 2020; y un 46% en 2021) aunque no en un plazo de 5 años. Este dato podría estar relacionado con que la gran mayoría de los encuestados teme las dificultades que a su entender entraña la crianza: 8 de cada 10 considera que existen mayores dificultades para formar una familia ahora, que en generaciones anteriores.

Deterioro de la salud mental de las familias

La situación de la salud mental de la población española es otro de los asuntos que el informe subraya principalmente. El estudio califica de “preocupante” que más de la mitad de los entrevistados reconozca que, o bien ellos mismos, o alguien de su entorno, ha sufrido preocupación (77%), irritabilidad (61%), alteración del sueño (57%) o angustia (54%) durante el último año.

Estos datos han aumentado y se han agravado respecto al año anterior: una cuarta parte de los encuestados afirma que ellos o alguien de su alrededor ha consumido por primera vez algún ansiolítico en 2022, lo que supone una subida de casi 7 puntos respecto a 2021. La situación afecta especialmente a las familias con hijos menores a cargos, en las que el porcentaje de consumición de ansiolíticos ha aumentado hasta el 28%, 3 puntos más que la media.

Dificultades económicas, sentimiento de soledad e incertidumbre en progenitores y redes sociales, bullying y baja autoestima en hijos

Por lo demás, las dificultades económicas (70%), el sentimiento de soledad (46%) y la incertidumbre en general (43%) son las principales causas de ese deterioro de la salud mental.

“Con respecto a los jóvenes, el impacto en la salud mental apunta al ámbito de Internet”, indica el barómetro. Así lo consideran las familias españolas, que aseguran que los principales motivos para el empeoramiento de la salud mental de los jóvenes son: la influencia de las redes sociales (53%), el aumento del bullying en los colegios (43%) y la baja autoestima (39%).

Asimismo, en el informe se destaca “influencia nociva” de ciertos programas y series de televisión como un aspecto preocupante que debe ser tenido en cuenta: más de la mitad de los encuestados reconoce no estar de acuerdo en que las series y programas dirigidos a los jóvenes españoles fomenten las relaciones “sanas”.

Otra causa de malestar e incertidumbre proviene de la crisis económica: el 52% de las familias españolas considera que la situación económica actual en España es mala, y un 24% (7 puntos más que el barómetro anterior) considera que dentro de un año la situación económica en su hogar será peor. De hecho, los niveles de pesimismo registrados este año entre la población son equiparables a los de la crisis sanitaria provocada por la pandemia en 2020 (30%) o a los de la crisis financiera de 2008 (27%).

La caída de la natalidad: Un problema “serio”

La natalidad cae en picado en España: en 2021 nacieron menos bebés que nunca. Según los datos del INE, en el año 2021 se registró la tasa más baja de natalidad en los últimos 80 años. Además, la mayor caída se registra en las madres más jóvenes y va disminuyendo a medida que aumenta la edad materna, coincidiendo con los datos de la encuesta de The Family Watch.

La tendencia a ser madre cada vez más tarde persiste, y las mujeres cada vez tardamos más en tener nuestro primer hijo. En la última década, la edad media de las mujeres para tener un hijo superó la treintena. Un dato que ha ido aumentando año tras año. En 2021, sólo el 25% de las madres primerizas tenían menos de 30 años y la franja de madres de 45 a 49 años creció un 2,53%.

El director asociado del Departamento de Asuntos Monetarios de la Reserva Federal de Estados Unidos, David López-Salido, vaticinaba hace 5 años que “la demografía será la causa de que el crecimiento económico occidental” sea “insostenible” a medio y largo plazo, como consecuencia del “envejecimiento de la generación del baby boom” y “la baja tasa de natalidad”.

Según el experto, “las economías occidentales se verán en serias dificultades para continuar con el desarrollo económico”. En este sentido, López-Salido señalaba que uno de los factores determinantes que influyen en el crecimiento de la economía de un país es “la evolución de la población y su distribución por edades”.