Fertilidad masculina: Desarrollan un prometedor tratamiento contra la disfunción eréctil que podría decir adiós a la viagra

Aproximadamente la mitad de los hombres entre los 40 y los 70 años sufren algún tipo de disfunción eréctil que afecta a su capacidad de ser padres manteniendo relaciones sexuales. Ahora, científicos chinos han logrado restaurar la función eréctil en cerdos sustituyendo tejidos dañados del pene por un innovador tejido sintético.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera la disfunción eréctil como una enfermedad, que afecta a más de 100 millones de hombres en todo el mundo, con cifras entre el millón y medio y los dos millones en España.

Pero lo más preocupante es que solo el 16,5% busca ayuda médica especializada debido a la presión que sienten los hombres que la padecen como consecuencia de los factores culturales, sociales, económicos y hasta morales.

Un nuevo tejido artificial es capaz de restaurar la función eréctil

Según los resultados un estudio publicado en la revista la revista “Matter”, científicos chinos han logrado restablecer la función eréctil de cerdos utilizando tejido artificial. Se trata de parches hechos de un material sintético denominado “túnica albugínea artificial” (ATA), que imita una vaina fibrosa de tejido necesaria para mantener las erecciones. ATA tiene propiedades mecánicas biónicas y biocompatibilidad, y puede reparar lesiones.

En muchos casos, la causa de la disfunción eréctil es la enfermedad Peyronie, en la que tejidos cicatrizados por lesiones provocan dolor y problemas en la función eréctil. Tradicionalmente, esta enfermedad se suele tratar sustituyendo los tejidos dañados en el pene, pero a menudo el sistema inmunitario rechaza las inserciones de materiales biológicos.

Por eso, este descubrimiento supone un gran hallazgo para la medicina y un paso esperanzador para quienes padecen esta enfermedad.

Un hallazgo sorprendente

“Nos sorprendieron los resultados en los experimentos con animales, en los que el pene recuperó la erección normal inmediatamente después del uso de la ATA”, explica Xuetao Shi, investigador de la Universidad Tecnológica del Sur de China en Guangzhou (China) y autor del estudio.

Los investigadores construyeron una imitación sintética de las fibras de los tejidos eréctiles de los mamíferos (llamadas túnica albugínea o TA), que puede someterse a explosiones cíclicas de relajación y estiramiento al tiempo que resiste la fatiga y mantiene la dureza. También soporta los pinchazos de las agujas durante la sutura.

A continuación, probaron su tejido sintético en cerdos con lesiones en la túnica albugínea y, aunque el ATA no puede restaurar por completo la intrincada estructura del tejido natural (ya que no sustituía la función de otros tejidos también implicados, como los vasos sanguíneos), sí es capaz de reparar la función eréctil normal en los cerdos tras una inyección salina.

Adiós a la viagra, hola al “pene artificial biónico”

 “Los resultados un mes después de la intervención mostraron que el grupo de ATA obtuvo buenos resultados de reparación, aunque no perfectos” – manifiesta Shi – “Nuestro trabajo en esta fase se centra en la reparación de un solo tejido del pene, y la siguiente fase será considerar la reparación del defecto peneano global o la construcción de un pene artificial desde una perspectiva holística”.

¿Qué es una disfunción eréctil?

¿Qué ocasiona la disfunción eréctil?

La disfunción eréctil la pueden causar problemas físicos o problemas psicológicos. La excitación sexual es un proceso complejo que involucra al cerebro, las hormonas, los nervios, los músculos y los vasos sanguíneos. Un fallo en uno de estos componentes puede provocar un problema.

La impotencia a menudo es un síntoma de otro problema de salud o de un factor relacionado con la salud. Según los especialistas, hay diversas causas que pueden causar disfunción eréctil. estas se engloban en 4 grupos: problemas de salud, problemas psicológicos, efectos secundarios de medicamentos y malos hábitos de vida.

Causas médicas

En algunos casos, la causa es la enfermedad Peyronie, pero también puede haber otros problemas médicos causantes de impotencia como padecer diabetes tipo 2 (los hombres con diabetes tienen entre dos y tres veces más probabilidad de desarrollar disfunción eréctil que los que no la tienen); enfermedad del corazón y los vasos sanguíneos; ateroesclerosis; presión arterial alta; enfermedad de los riñones; esclerosis múltiple; lesión causada por tratamientos para el cáncer de próstata (incluyendo la radioterapia y la cirugía de próstata); lesión del pene, la médula espinal, la próstata, la vejiga o la pelvis; o la cirugía para el cáncer de vejiga.

Efectos secundarios de medicamentos

La disfunción eréctil también puede ser un efecto secundario de muchas medicinas comunes como medicinas para la presión arterial, antiandrógenos (medicamentos usados ​​para la terapia del cáncer de próstata); antidepresivos, tranquilizantes o sedantes prescritos; supresores del apetito o medicinas para úlceras, entre otros.

Problemas psicológicos o emocionales

Asimismo, problemas psicológicos o emocionales pueden empeorar o favorecer el desarrollar disfunción eréctil: miedo al fracaso sexual, ansiedad, depresión, sentimientos de culpa relacionados con el desempeño sexual o ciertas actividades sexuales, baja autoestima, estrés por el desempeño sexual o estrés generalizado (por situación laboral, personal, familiar, etc.). Si es tu caso, en la Tribu CSC puedes consultar online a nuestras psicólogas Mamen Bueno y Elena Mesonero durante todo un mes gratis.

Hábitos de vida insanos

Ciertos factores y comportamientos relacionados con la salud también pueden contribuir (fumar, consumo excesivo de alcohol, uso de drogas ilegales, sobrepeso, falta de actividad física…).

¿Cómo saber si una persona es impotente?

Los síntomas de la disfunción eréctil son:

• No poder tener una erección cuando se desea tener relaciones sexuales, aunque sí se pueda tener en ocasiones.
• Tener una erección, pero no poder mantenerla el tiempo necesario para poder tener relaciones sexuales.
• No poder tener una erección en ningún momento.