24 de octubre – Día Internacional contra el Cambio Climático: Qué actividades podemos hacer con nuestros peques para luchar contra el cambio climático

El 24 de octubre se celebra en todo el mundo el Día Internacional contra el Cambio Climático. Una fecha instaurada por la ONU debido a los efectos que está causando en el planeta el cambio climático. 

Tenemos en nuestras manos cuidarlo y enseñar a los más pequeños a hacerlo con actividades sencillas y divertidas.

Actividades para niños para luchar contra el cambio climático

Adultos y niños estamos obligados a cuidar el planeta. Al fin y al cabo, es donde vivimos y, aunque todos estamos de paso, también es el que dejaremos a las generaciones venideras. Por ello, es importante explicarles a los más peques qué es el cambio climático e inculcarles actividades sencillas en su día a día que contribuyan a hacer de nuestro mundo un espacio mejor. 

Reciclar

No hay excusas para no reciclar. Y es algo que podemos enseñar a nuestros peques de forma divertida jugando con el color de los contenedores o preguntándole antes de desechar cualquier cosa, en qué contenedor debemos ponerlo. 

 

 

Salida al campo o a la playa

Muchas veces, cuando vamos al campo o a la playa comprobamos que está lleno de desperdicios. Así que, además de pasar un día divertido al aire libre respirando aire puro, podéis aprovechar para recoger la basura que encontréis a vuestro paso. Además de la satisfacción por dejar el espacio limpio, aprenderán la importancia de no tirar la basura al suelo. 

Escribe un cuento

Los cuentos infantiles siempre son una magnífica opción para enseñarles cosas a los más peques ya que suelen entender mejor cualquier información cuando se le transmite a través de una historia. Puedes escribir tú mismo un cuento para explicarles en qué consiste el cambio climático: el protagonista puede ser la Tierra enferma debido a los gases que producimos los humanos. 

Actividades para luchar contra el cambio climático: Planta un árbol o una planta

Dicen que todos deberíamos plantar un árbol en algún momento de nuestra vida, y qué mejor momento para hacerlo que en el Día Internacional contra el Cambio Climático. Puedes hacerlo en algún lugar cerca de tu casa para ver cómo crece o cuidarlo en caso de ser necesario. También puedes optar por plantar alguna flor o una planta para ver su evolución día a día en casa. Y si lo quieres hacer aún más fácil… ¡Plantad una lenteja!

 

 

Repasa los animales en peligro de extinción

El cambio climático conlleva la desaparición de muchas especies, por lo que numerosos animales están en peligro de extinción, si no han desaparecido ya. Por eso, el Día Internacional contra el Cambio Climático es un buen momento para repasar todos ellos y hablar de lo que podemos hacer para aportar nuestro granito de arena. 

Manualidades

Todos tenemos en casa una botella de plástico (demasiadas, la mayoría de las veces), un tetra brik de leche, una caja de zapatos o un bote de cristal de conservas. Con algo de imaginación y pocos materiales, ¡tienes una tarde de diversión y enseñanza asegurada! Puedes usar pinturas y legumbres para hacer botellas sensoriales, por ejemplo. 

También puedes optar por colorear. Puedes proponer pintar dos dibujos: uno de una playa limpia y otro de una playa llena de basura. Así, podrán observar las diferencias entre una y otra y los efectos que tienen las personas y el cambio climático en el medio ambiente.

Actividades sencillas del día a día

Cerrar el agua del grifo cuando nos cepillamos los dientes, ducharnos en lugar de bañarnos, bajar la calefacción en casa o usar el transporte público o ir andando al colegio en lugar de usar el vehículo propio son algunas de las tareas sencillas que podemos incorporar en nuestro día a día con nuestros pequeños. 

 

 

Usa productos con materiales reciclados o biodegradables 

¿Cada vez que vas al súper tienes que coger varias bolsas de plástico para las frutas y verduras? Enséñale a tus peques que las bolsas se pueden usar varias veces, solo tienes que guardarlas y llevarlas al supermercado en lugar de tirarlas cuando llegas a casa. Y mucho mejor es si usas una bolsa de red en las que se vea lo que hay en el interior para que te la puedan pesar en la caja. ¡Las venden ya en muchos establecimientos y la podréis usar infinitas veces!

Lo mismo ocurre con los folios, por ejemplo. Si los puedes comprar con papel reciclado, mucho mejor, ¿no crees? Puedes aprovechar para explicarle a tu hijo por qué tiene otro color en lugar del blanco habitual y la importancia de reciclar para evitar la tala masiva de árboles.

 

 

Si aún así te faltan ideas, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico recoge en su Guía de recursos educativos sobre Cambio Climático todo tipo de libros y actividades clasificadas por edades para enseñar a los más pequeños los efectos del cambio climático. También la Junta de Andalucía cuenta con la Guía Didáctica del Programa KiotoEduca en la que propone actividades de educación ambiental frente al cambio climático.

También en la Tribu CSC encontrarás un grupo de padres y madres con las que compartir experiencias del día a día. Además, podrás consultar a nuestro equipo de expertos cualquier duda sobre salud materno-infantil o crianza respetuosa. El primer mes es gratis y no tiene compromiso de permanencia. 

24 de octubre: Día Internacional del Cambio Climático

Aunque el cambio climático no es más que un proceso natural que se desarrolla a lo largo del tiempo, este se ha visto muy acelerado por las diferentes actividades y la contaminación generada por el ser humano. Con una velocidad alarmante, puede llegar a ocasionar la extinción de millones de especies, así como su muerte (incluida la de los hombres y mujeres). 

 

 

El cambio climático no es malo por sí mismo. De hecho, gracias a él es posible la vida en la Tierra, ya que permite retener el calor de los rayos de sol en la atmósfera. Sin embargo, el aumento de la concentración de gases sí provoca la alteración del efecto invernadero natural, provocando el aumento global de la temperatura y, a su vez, el cambio climático. Como consecuencia, además de la subida de las temperaturas, nos encontramos con el derretimiento de los hielos, la subida del nivel del mar, el aumento de fenómenos meteorológicos extremos como huracanes o inundaciones o la amenaza de la producción de alimentos, entre otros. 

El principal responsable del cambio climático (más allá de las personas) es el efecto invernadero, que es fruto de ciertos tipos de gases como el dióxido de carbono. Aunque esta liberación se considera normal para la supervivencia de las especies en la Tierra, los niveles se han superado hasta llegar a niveles preocupantes debido a la industrialización. 

Para tratar de paliar sus efectos, se firmó el Acuerdo de París que fue adoptado en la Conferencia sobre el Clima de París en diciembre de 2015  y ratificado por la Unión Europea en noviembre de 2016. El acuerdo establece un marco global para evitar un cambio climático peligroso, manteniendo el incremento de la temperatura mundial por debajo de los 2ºC e incluso limitarlo a 1,5ºC. Sin embargo, la realidad es que, seis años después, aún estamos lejos de cumplir esos objetivos.